Una vez más, y por enésima ocasión, Sergio Llull fue 'El Increíble'. El extraordinario base-escolta mahonés del Real Madrid, pocas fechas después de liquidar al Baskonia en una portentosa actuación individual en la semifinal de Copa, regresa a un primer plano con motivo de otra acción tan determinante, como estelar e impresionante, el 'triplazo' desde veinte metros que le endosó el domingo al Valencia para invertir, en el último segundo, el signo de un partido que el equipo blanco advirtió perdido solo instantes antes del descomunal acierto de Llull (94-95; 17 puntos y 7 asistencias para el jugador de Maó).
Una maniobra ofensiva de difícil parangón, que además de significar la quinta victoria seguida del Madrid en Liga Endesa, pulveriza la invulnerabilidad de los 'taronja' en casa, y por encima de ello, sobresalió la jugada más revisada en la red desde que se consumó (al instante de redactar este artículo, rebasaba las 5.6 millones de visualizaciones).
«Ha estado bien, espectacular, increíble, también un poco cuestión de suerte, pero hay que tirar y meterla desde ahí», refirió un Llull visiblemente satisfecho tras el duelo en la 'Fonteta' en manifestaciones recogidas por el programa El Chiringuito de Jugones, emitidas en la madrugada del domingo a lunes. Asimismo, sueño cumplido para el exterior forjado en la cantera de La Salle Mahón. «Siempre había soñado con lograr una canasta ganadora desde medio campo; ya lo he hecho», explicó el menorquín, al que en la plaza levantina ya sabían de la factura de sus acciones. No en vano, solo unos meses atrás, en el marco de los play offs, efectuó una jugada, sino similar, sí parecida en efecto, en enclave y con rival idénticos (100-103 tras triple suyo en el último segundo). «Tienes que tirar desde donde la coges, ellos estaban celebrando su canasta... no pensaba que entraba, me quedé un poco sorprendido», insistió sobre el triple del año su propio autor.
Al margen, y en un tiempo en que la sección madridista reluce muy por encima del equipo de fútbol, Llull incidió en la importancia de contar un buen ambiente en el vestuario, «es importante que los jugadores seamos amigos, ayuda a que las cosas vayan mejor. En el vestuario somos un equipo», expuso Llull, totalmente «centrado» en el presente y con la NBA totalmente aparcada. «Siempre lo he dicho, estoy muy a gusto en el Madrid», termina 'El Increíble Llull'.
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