Franco, en su despacho en Sínia Costabella. | Javier Coll

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En el 2014 que ahora recorre se cumplen veinticinco años del ingreso de Paco Franco en el CD Alcázar. Llegado a la Isla -y al mismo- en 1989 por motivos laborales, este catalán profundamente enraizado en la Isla estrenó su labor asumiendo la dirección del infantil A rojo, al que condujo a la supremacía insular en 1990. Completó un decenio de dedicación exclusiva en el banquillo, desfilando por la práctica totalidad de categorías del club mahonés, en cuya directiva se integró con el umbral del presente siglo. Acceder a la presidencia, donde acumula ya más de una década, resultó un paso más y natural en su trayecto, cargo del que mañana será reelegido por otros cuatro años (hoy agota el plazo para formalizar candidaturas y no existe ninguna propuesta al margen de la suya).
El directivo se siente «con fuerzas» para arrogarse otro cuatrienio al frente del club, para el que prevé una línea de acción muy marcada en los dos años inmediatos, direccionada a liquidar totalmente su deuda, que oscila los 50 mil euros. «El día a día es 'durillo', pero estoy motivado y me veo con fuerzas, principalmente por la gente que tengo alrededor, directivos, técnicos... es lo que me da energía para seguir», observa Franco. El mandatario alude a la cuestión económica como una prioridad para desencorsetar e incrementar las vías de futuro. «Hemos rebajado de 120 mil a unos 50 mil en un par de años y creo que en otros dos, o quizá uno, estaremos a cero; eso nos permitirá  apostar por otras cosas», anota el dirigente rojo, que rechaza aventurar más sobre esas posibles 'apuestas' a medio plazo. «Estamos en lo de siempre, nuestros jóvenes marchan a estudiar... a saber lo que tendremos dentro de dos años en cuanto a jugadores, pero lo fundamental es recuperarnos económicamente», abunda.


Junto a Franco seguirá el «98% del actual equipo directivo», desvela, y a partir de abril se estudiarán posibles modificaciones en la estructura técnica. «Rafa Llopis está realizando una excelente trabajo en la dirección de cantera, el problema es que no tiene tiempo suficiente; en cualquier caso en el club contamos con él, es una persona muy válida y llegado el momento veremos lo que hacemos en ese sentido, ya habrá tiempo», repasa Franco, quien «descarta» a pleno recuperar la figura de director deportivo con dedicación exclusiva, y al ser cuestionado por el mejor y peor momento de su mandato más reciente, refiere «al batacazo económico de estos años como lo más negativo», y a la «estancia en EBA, inolvidable», así como «toda la gente que ha pasado por aquí, y algunos ya no están, como los aspectos más positivos», termina. Franco sigue al frente del Alcázar con un precepto cardinal insoslayable; déficit cero.