Un triunfo obligado es el que perseguirá esta tarde el Menorca Bàsquet en plena Semana Santa, en el partido que le enfrentará al Palencia Baloncesto, un rival modesto pero que ha protagonizado una campaña notable y todavía alberga alguna esperanza para meter la cabeza en el play-off por el título.
El equipo de Josep Maria Berrocal inicia este sprint final del campeonato con la meta puesta en la defensa de la segunda plaza que actualmente ostenta, aunque comparte la puntuación con otros tres equipos: Burgos, La Palma y Lleida. Los mahoneses dependen de sí mismos pero tras un mes de marzo muy pobre en resultados, ahora ya no tienen margen de error. Ganar los cuatro últimos partidos, perfectamente a su alcance, les concedería la posición de privilegio para afrontar los play-offs por el ascenso con la ventaja de campo asegurada. Este ventaja, sin embargo, no preocupa a Berrocal "porque mi experiencia me dice que no es definitiva; gané una liga con el Barça perdiendo el factor pista y el año pasado con mi anterior equipo sin tenerlo a favor en la final", recordaba ayer". Por eso no consideraría una decepción perder esa segunda plaza en los cuatro partidos que restan, "sólo sería un reto mayor", explica.
La máxima preocupación del técnico catalán es que su equipo "sea duro e intenso porque no serlo siempre es lo que nos hacer ser irregulares. Es un problema mental, no físico". Admite que la derrota en Lleida "personalmente me cuesta digerirla, como todas, porque no fuimos lo firmes que debíamos ser, como sí estuvimos contra ellos aquí en la primera vuelta". Y en ese sentido afirma que "el equipo debe dar un paso adelante sí o sí para llegar bien a los play-offs porque somos conscientes que lo podemos hacer mejor", aunque recuerda que "yo aún no me veo clasificado para las eliminatorias", y trata de trasladar esa opinión a sus hombres para que no piensen más en ese play-off que en los partidos que restan. Esos cuatro choques son como cuatro finales, "durísimas porque jugamos ante rivales que luchar por no entrar en el play-out o en el de arriba y en este momento de la temporada tan decisivo, la dificultad es mayor". Berrocal rechaza, por tanto, que su equipo teóricamente, deba salir airoso de estos cuatro choques finales en función de su superioridad, "porque la teoría en deporte no existe y si no jugamos al 100 x 100 el nivel se iguala ante cualquiera que sí lo haga".
El rival de esta tarde, Palencia Baloncesto, puede ponerle en algún aprieto a partir de su fortaleza en el juego interior con uno de los mejores pívots de la Liga, Jamaal Moss. El equipo de Lezcano ha sobrevivido a la marcha de Michel Diouf, que era su otra gran referencia hasta que fue captado por el Fuenlabrada hace 11 partidos.
"Es un equipo trabajado, duro, con buena defensa al que ya nos costó mucho ganar allí aunque ahora llega con tres cambios, Xavier, Mc Dermot y Guerra", comenta Berrocal.
La lucha por el rebote será determinante, "sí, ellos destacan en esta faceta y nosotros a veces fallamos en el defensivo o el ofensivo".
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