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Menorca, de verde ayer, logró una importante victoria en la pista del colista, un Benahavís que durante la primera parte del encuentro plantó cara. De hecho, aunque los de Berrocal fueron siempre por delante, el partido no empezó a romperse hasta el tercer cuarto, cuando los locales comenzaron a acusar el derroche físico.

Pese a todo, los andaluces no bajaron nunca los brazos y pelearon hasta bien entrado el último cuarto, aunque fue inútil y el Menorca acabó ganando con comodidad gracias a un buen tercer cuarto y a un excelente trabajo defensivo para poner punto y seguido a su buena racha como visitante. Pero el Benahavís no es ya el mismo equipo al que los menorquines derrotaron claramente en la primera vuelta.

El encuentro comenzó con mucha igualdad entre dos equipos que se mostraban excesivamente fallones y que en los primeros seis minutos de partido tan sólo fueron capaces de anotar cuatro puntos cada uno. A partir de ahí, las ventajas fueron siempre visitantes, aunque muy ajustadas. Más debido a los errores en el lanzamiento de unos y otros que por una excesiva intensidad defensiva. El Menorca no lograba frenar el correcalles que era el encuentro, aunque un triple sobre la bocina de Morentin le permitió irse al final del primer cuarto con una ventaja de cuatro puntos (10-14).

La dinámica del partido no varió en el segundo cuarto. Las idas y venidas, los fallos en uno y otro aro y las perdidas de balón eran una constante. En esas circunstancias, pese a todo, lograron mantener la renta de cuatro puntos. Pero los locales entraron pronto en bonus y el Menorca supo sacar provecho de ello para aumentar un poco mas su renta (17-22, minuto 14). Poco a poco los visitantes fueron encontrando algo más de acierto en el lanzamiento y al borde del descanso dos tiros libres transformados por Otegi les permitió irse al descanso con la máxima ventaja hasta el momento (21-28).

El cuarto decisivo

No variaron mucho las cosas tras el descanso. Los locales echaban el resto en defensa para mantener a raya al Menorca, que aunque mantenía una ventaja de entre 7 y 9 puntos, no rompía definitivamente el partido (28-37, minuto 25). Pero el Benahavís comenzó a acusar el esfuerzo físico, lo que coincidió con una mejora en el juego menorquín. Apretó mucho en defensa y encontró por fin a Moncasi, que con su envergadura hizo mucho daño al rival en la pintura.

El Menorca logró así firmar un parcial de 0-6 y abrir una brecha en el luminoso que parecía ya definitiva (28-45, minuto 28). De ahí al final del cuarto le bastó con centrar sus esfuerzos en no permitir reaccionar a los locales para irse al final con 17 puntos de ventaja (32-49).

La ventaja menorquina alcanzó los 22 puntos al inicio del último cuarto tras un triple de Moncasi (32-54, minuto 33). El encuentro parecía ya visto para sentencia y supieron jugar con el reloj y el marcador a favor. Mientras, el Benahavís no se conformaba y continuaba intentando acortar distancias, pero los menorquines se mostraron muy sólidos en tareas defensivas y cortaron de raíz todos los intentos de reacción del conjunto andaluz, que tenía muchos problemas para encontrar buenas posiciones de tiro. Pese a todo, los locales consiguieron sacar fuerzas de flaqueza y aprovecharon las rotaciones de Berrocal para anotar un parcial de 9-0 que dejó la diferencia en 13 puntos, 41-54, a falta de 4'16 para el descanso.

Pero el Menorca no perdió los nervios y apretó de nuevo los dientes en defensa, consiguiendo frenar de nuevo a su rival. Además, el Menorca volvió a encontrar en el lanzamiento de tiros libres un arma eficaz para ampliar de nuevo la renta hasta los 19 puntos (43-62, a falta de 1'14 para el final).

Ahí se acabó un partido marcado por los errores de unos y otros en la primera parte pero resuelto fácilmente después.