Satisfecho. Pérez está contento a nivel individual y colectivo - Archivo

TW
0

La sonrisa, a día de hoy, abandera el vestuario del Menorca Bàsquet. El optimismo que otorga aprender a ganar a domicilio ante dos rivales directos en la zona VIP -Burgos y UB La Palma- ha restado nervios en una plantilla que confía más que nunca en sus opciones y que no se obsesiona con la Copa Príncipe, por mucho que se especule. Un claro ejemplo de la buena sintonía del vestuario es el joven base Dani Pérez, una de las revelaciones del equipo de Josep Maria Berrocal.

El joven director de orquesta está asumiendo minutos importantes alternando su participación con Jorge Jiménez. "Estamos en el mejor momento de la temporada pero no podemos relajarnos, hay que seguir creciendo" avisa el catalán, que vivirá una jornada especial el sábado al enfrentarse al poderoso Lleida equipo en el que militó cedido por el Barça la temporada pasada."El Lleida es el equipo más sólido de la competición con un balance, de diez victorias y dos derrotas, que habla muy bien del trabajo que están haciendo", explica Dani Pérez, que destaca que "los dos partidos perdidos han sido muy ajustados y se nota la mano de Ricard Casas, un gran entrenador, muy exigente y que imprime un nivel alto a sus equipos". El base destaca que "este Lleida no se parece en nada al equipo en el que yo estuve, se nota la mano del entrenador y han pasado de no saber si saldrían a LEB Oro o no a fichar jugadores con experiencia a última hora y sin saber qué rendimiento les podrían dar, como el caso del base Marcus Norris, Alzamora o Paco Vázquez, y lo están haciendo todo perfecto".

Pérez, que en lo que va de temporada acumula unas medias de 8,9 puntos, 1,1 rebotes, 3,5 asistencias y una valoración de 8,9 en poco menos de 20 minutos por encuentro admite que "estoy bastante contento a nivel personal de como estoy jugando porque estoy anotando y aportando pero lo importante es que si un día no sume uno sea otro el que ayude al equipo y que vayamos creciendo".

Al joven director de juego no le cabe la menor duda de que el Menorca "ha demostrado que podemos ganar donde sea después de hacerlo en dos canchas complicadas, ante equipos muy buenos y donde perderán pocos partidos a parte de los nuestros" y todo ello porque "hemos solucionado los problemas que teníamos ya que el único rival que verdaderamente teníamos éramos nosotros mismos".

"Quizás el punto del Lleida que debemos atacar es que hay jugadores que acumulan muchos minutos, como el caso de Norris, por lo que hay que castigarles todo lo que podamos con la defensa y el ataque para que no lleguen frescos al final del partido y acelerar el ritmo de juego".

Pérez vivirá "un partido especial porque es la primera vez que me enfrento oficialmente a un ex equipo y todavía hay gente en Lleida con la que trabajé el año pasado y guardo buen recuerdo".