De la decepción a la necesidad

Por primera vez esta temporada, el equipo de Paco Olmos aparece en zona de descenso, en solitario, junto al todavía rezagado Granada. El cuadro alicantino ha reaccionado y su último triunfo le ha permitido dejar atrás a los menorquinistas que se quedan con 5 triunfos por 6 el Manresa, derrotado en Bilbao, y el propio Meridiano Alicante. Es decir que el arranque de la segunda vuelta tensa el estado del equipo menorquinista en su carrera hacia la permanencia.

Falló el grupo en Pucela donde no puso la intensidad y la agresividad que le han permitido ganar los cinco encuentros hasta el momento, hasta provocar el enfado de su propio entrenador. Con jugadores bajo mínimos, como Donaldson, y el desplome del último cuarto, como ha sucedido en otras ocasiones, es difícil que el Menorca pueda sacar adelante los encuentros que necesita para obtener su objetivo.

La mejor conclusión la sacó el propio vestuario al admitir su culpa tras la arenga del entrenador quien habló de falta de hambre para ganar este choque. Sabe el Menorca que debe jugar al límite de sus opciones partido a partido si pretende acumular los triunfos necesarios para salir adelante.

El calendario inmediato que le aguarda al equipo marca tres partidos fundamentales en las tres próximas jornadas: DKV Joventut, en casa el próximo domingo, Lagun Aro GBC, en San Sebastián, y Meridiano Alicante, de nuevo en Maó. Se trata de tres choques fundamentales porque el Menorca debería sacar adelante, al menos dos de ellos para volver a la senda de la salvación. Si la Liga mantiene su dinámica de resultados, muy probablemente el Menorca precisará alcanzar los 12 triunfos para conseguir la permanencia, de ahí la necesidad perentoria de buscar la hombrada ante un Joventut, que llegará diezmado por la baja de su tirador más fiable, English, la de Norel, y herido por su contundente derrota ante el Cajasol (59-79) este pasado domingo en un partido en el que su técnico, Pepu Hernández, fue descalificado. Posteriormente, en San Sebastián, la historia dice que el Menorca tiene un buen 'feeling' con esa cancha en la que siempre ha ganado, y además el equipo donostiarra está en una dinámica negativa, como prueba que haya perdido sus últimos seis partidos. Y en cuanto al choque ante el Meridiano Alicante, su trascendencia es obvia dada la situación de ambos conjuntos en la tabla clasificatoria.

La Penya, con lesionados, sin un euro y el menorquín Alex Suárez, a punto
Quizás sea un buen momento el actual para que el Menorca venza el domingo al DKV Joventut que llegará a la Isla inmerso en una gravísima crisis económica que además le imposibilita, por ahora, realizar fichajes para cubrir las importantes lesiones de Carl English y Henrik Norel.

La entidad que preside Jordi Villacampa se acogió al concurso de acreedores para poder continuar adelante con una deuda acumulada que alcanza los 10 millones de euros.

La baja de English, jugador fundamental en el esquema de Pepu Hernández, más la de Norel han mermado la capacidad del equipo que el domingo fue apalizado en Badalona por el Cajasol en un partido que encendió a la afición local. Además para el partido ante el Menorca es duda el base Josep Franc por una elongación en el abductor.

El director deportivo de la Penya, Jordi Cairo, ha declarado que el administrador judicial que lleva el concurso de acreedores ha dejado claro que no hay un euro para fichar. Pese a ello Cairó ha asegurado que busca alguna solución para realizar, al menos un refuerzo: «Seguramente será un exterior, pero tenemos diferentes opciones".

Las bajas podrían acelerar el debut en la ACB del joven pívot mahonés, Alex Suárez, todavía en edad junior, que ha sido convocado en los dos últimos partidos por Pepu y, con toda probabilidad, viajará a Maó. Es posible que se estrene ante su club de origen. Suárez es uno de los jóvenes más prometedores de la cantera verdinegra.