Para ganar el domingo al Estudiantes, la primera clave que ha pedido Paco Olmos a sus jugadores es que estén especialmente concentrados porque se medirán a un rival especialmente "complejos de estudiar porque según el quinteto que haya en la pista las prestaciones varían mucho y debemos saber qué hacer en cada minuto del partido".
Pero, tras las declaraciones de Diego Sánchez en las que adelantaba que el equipo se iba a "dejar la piel", el entrenador advierte que el partido goza de "una importancia máxima" porque "mientras no consigamos ganar fuera cada partido en casa supone una final". Una final para la que el valenciano contará con todos sus efectivos, a pesar de que la semana de entrenamientos se ha hecho especialmente dura por el frío.
Pero, ¿qué clase de equipo viene mañana al Pavelló? Para el preparador del Menorca, el Estudiantes es un conjunto completo amparado por "Caner-Medley y Gabriel por dentro, más la velocidad de Asslin y el momento que aparece Jassen" lo que forma el espíritu del conjunto del Ramiro Maeztu, al que se le suman "jugadores que en un momento dado te pueden hacer daño como Tyrone Ellis, Granger...".
Todo ello, sin contar los improvistos que pueden surgir como la interesante evolución del jovencísimo Jaime Fernández, que a sus 17 años empieza a tener importancia en el equipo de Luis Casimiro.
Este panorama obliga al ejército menorquín a concentrarse al máximo, así como al mayor esfuerzo para sumar la quinta victoria ante un Estudiantes que vería cómo el Menorca le adelanta en la clasificación, lo que puede suponer un plus de motivación.
"Ganar nos pondría en la línea en la que queremos estar para lograr la permanencia". Pero Paco Olmos está satisfecho con lo que ha visto hasta el momento. "A nivel defensivo hemos automatizado muchas situaciones, hemos ganado en bagaje táctico defensivo, nuestras alternativas llegan a generar dudas a los rivales y nuestro nivel de agresividad sigue siendo bueno, sobre todo en Maó", mientras que en ataque "hemos mejorado mucho el juego de equipo, el nivel de pérdidas, los pases, hay más movilidad y en el déficit nos queda el acierto, debemos tirar más", razona Olmos.
El reto de anotar más
No es ningún secreto que al Menorca le cuesta sumar en ataque. Los poco más de 66 puntos de media que anota el equipo de Paco Olmos dificulta la tarea de ganar.
"Nos cuesta anotar canastas fáciles, nos encontramos rivales grandes que nos obligan a estar más acertados, pero no debemos obsesionarnos con los tiros de 3, ya que creo que para tener una mejor anotación debemos mejorar los tiros de 2" dice el 'coach', que añade que "ese porcentaje nos revela que somos lo que somos, tenemos un desgaste tremendo en defensa, no tenemos tiradores por lo que necesitamos ese punto de frescura a la hora de meter puntos".
Para el valenciano, es fundamental que el equipo se desgaste en el partido porque es lo que da opciones de ganar, pero también deben ser "fuertes mentalmente" para poder afrontar los tiros con mayor comodidad y mejor acierto".
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