Burtt. El nuevo escolta del ViveMenorca trata de convertir una canasta ante Tskitishvili y Sandes

TW
0

Miguel Juan Urbano Maó
Han tenido que transcurrir 77 días o, lo que es lo mismo, dos meses y medio con sus correspondientes 11 semanas para que el ViveMenorca y su gente volvieran a experimentar las sensaciones que producen un resultado victorioso, olvidado desde aquel lejano 21 de diciembre del pasado año. Llegó el triunfo ante el Fuenlabrada ayer en Maó (78-75), en un momento absolutamente crucial después que Cajasol y CAI también acumulasen una victoria más que habría supuesto el tiro de gracia para los de Imbroda si llegan a perder de nuevo. Esta vez no falló el cuadro mahonés y cazó dos puntos que le inyectan vida después de la muerte a partir del esfuerzo colectivo del grupo, el empuje fundamental de una afición entregada y una pizca de fortuna necesaria en los instantes finales.

El fichaje, Steve Burtt, no fue el salvador. Eso sí, colaboró en la apertura del juego ofensivo aunque sus errores finales en los tiros libres a punto estuvieron de llevar el partido a la prórroga si el último tiro de Oleson encuentra canasta. Para Eugene Pooh Jeter fue la gloria mayor por su exhibición de riqueza en ataque, mientras Stojic apareció cuando más se le necesitaba y Weis reinó en la pintura mientras conservó físico para ello.

Actitud intachable la que desparramó de salida el equipo de Imbroda que repitió el mismo 'cinco' de Zaragoza emparejando a Urko con el gigante, Ramos, y a Weis con Tsiktishvili. Fue Jeter quien abrió las hostilidades anotando los 6 primeros puntos del Menorca y mandando al banquillo a Valters con dos faltas. Mejoró el Fuenlabrada con el veterano Ferran López al frente de las operaciones (8-9), aunque su agresiva defensa le hizo cargarse de faltas (hasta 12 tiros libres lanzó el Menorca en el primer tramo con 11 aciertos).

Sucesivos parciales de 5 puntos a favor y en contra acabaron cerrando el cuarto con 18-16 para los locales. Burtt había entrado en cancha a tres minutos del final mientras Guil ya había recurrido a Oleson visto que su equipo estaba huérfano de perímetro y no podía con la defensa presionante dispuesta por Imbroda.

Esa manera efectiva de trabajar en toda la pista concedió la recompensa deseada al cuadro mahonés. Ahora con Ivanov en la pintura junto a Weis, el ViveMenorca se apropió del rebote, tanto en una canasta como en otra (8 ofensivos y 8 defensivos). Guil había diseñado una defensa en zona que rompieron Jeter y Marc Fernández con sendos triples. Ferran López cometía la tercera falta y se iba al banco para dejar a su equipo sin base pese a los esfuerzos compartidos de un Oleson desconocido ante la defensa de Burt primero y Stojic, después, y un Saúl Blanco también maniatado.

A 7'46 el Menorca daba el primer tirón (24-18). Dos triples de Mainoldi y un par de canastas de Ramos en el poste bajo detuvieron el avance menorquinista que, pese a todo, consiguió llegar al ecuador del partido con una renta interesante de 9 puntos (44-35) subordinada a una sensación de compromiso y efectividad a partir del trabajo defensivo.

La canasta inicial de un Jeter camino del MVP del partido, puso la máxima ventaja (46-35). Pero tres tiros bien seleccionados y no anotados de Burtt (0 de 6 hasta entonces en triples) impidieron el despegue que podría haber sido definitivo. Imbroda dio descanso a sus primeras espadas, Jeter, Weis y Stojic dejando en cancha un 'cinco' poco consistente. El Fuenlabrada aprovechó la coyuntura para encontrar vías de agua en la defensa local. Bueno ganó la partida a Jesús Fernández y Valters a Guzmán. Primero una antideportiva de Jesús y después un triple más adicional de Valters redujeron la ventaja del ViveMenorca a su mínima expresión (58-57).

El técnico de Melilla recuperó al 'cinco' de salida para abrir el tramo definitivo con Burtt en lugar de Baz­daric y una defensa en zona. Pero era el partido de Jeter que puso la proa hacia la victoria con un triple inicial al que seguiría poco después uno más de Stojic para consolidar un parcial de 7-0 (65-57 a 7'39).
El tiempo muerto de Guil dio como resultado dos triples de Valters que frenaron el tirón local. Un contraataque por la calle del medio de Tskitishvili devolvió el marcador casi a su situación inicial (67-66), a 4'55 del final. No se descompuso el Menorca que encontró, como siempre, en su capitán, Stojic, el auxilio definitivo para mantenerse por delante en el luminoso tras 7 puntos consecutivos pese a un nuevo triple de Valters. A 1'20, Oleson erraba un triple que podía igualar el partido y en la jugada siguiente, a 45 segundos del final, Stojic se buscaba la vida para convertir el 75-70 que parecía definitivo. Sin embargo un nuevo triple fuenlabreño y tres errores en los tiros libres de Burtt, el último ya con el 78-75 en el marcador, aún concedieron una última ocasión a Oleson, compleamente solo, para empatar el partido prácticamente sobre la bocina. Esta vez, 'el de arriba', como dijo Imbroda, echó una mano para desviar la del máximo anotador de la Liga y asegurar un triunfo que merecía quedarse en Maó. Hay vida después de la muerte y a ella se aferra el ViveMenorca.

Imbroda: "Sabía que íbamos a sufrir"
No tuvo reparos Javier Imbroda en destacar que "hoy el de arriba nos ha echado una mano". El técnico del ViveMenorca explicó que "el equipo ha jugado para ganar, pero tenemos un plus de ansiedad que nos impide romper el partido cuando podemos hacerlo, lo que es lógico por la trayectoria que hemos llevado. Sabía que íbamos a sufrir y así ha sido". Y en ese sentido lamentó que "me cabrea que Burtt se haya contagiado de esa ansiedad en el tiro, pero es un jugador equilibrado que nos ayudará mucho".

Oleson apenas anotó y ésa fue una de las claves como admitió Imbroda, "es el máximo anotador de la Liga y le hemos defendido muy bien, aunque otros días también le han defendido bien y ha metido 20 puntos. De todas formas nuestro hombre anotador también ha estado desafortunado cara al aro por lo que estamos en tablas".

Sobre la ausencia de Sundov dijo que "ha llegado muy justo para jugar y no ha podido participar pero lo hará porque le necesitamos" y destacó "el trabajo de Urko Otegui y Coco Ivanov que se han complementado muy bien". Imbroda también destacó a Weis, "que ha sido el dueño del rebote y ha sabido defender con inteligencia pese a que le sacaban de su posición".

Luis Guil, técnico del Fuenlabrada, explicó que "no hemos salido al partido con mentalidad de final y lo hemos pagado pese a reaccionar después". Valoró a Oleson "porque sin entrenar por la lesión ha hecho un gran esfuerzo".