Después de un comienzo fulgurante que le llevó a la final de la Supercopa y a ocupar zona de play-off en el primer cuarto de la Liga, el equipo de Curro Segura comenzó a desmoronarse, precisamente a partir de su escandalosa derrota en Menorca en la primera vuelta (102-75). Desde entonces, prácticamente ha caminado hacia atrás dejándose por el camino al propio entrenador granadino en quien dejaron de confiar los jugadores hasta enlazar una sola victoria en las trece últimas jornadas. No sabe ganar los partidos este CAI que además se ha convertido en la peor defensa de la Liga encajando reveses sonados en los últimos encuentros.
No es tan malo el equipo como lo pintan los resultados. El club se equivocó al cortar al gigante Starosta por Zizic ya que la ya débil presencia interior que tenía -Philip cumple pero no decide y Garcés no aparece comprometido y su juego es muy irregular-, se esfumó por completo. Curro Segura, como él mismo admitió el miércoles en este diario, basaba el ataque de su equipo en el perímetro donde tenía manga ancha para Quinteros, Lescano y compañía, junto al '4' que pidió, Larry Lewis, pero Alberto Angulo, su sucesor en una apuesta arriesgada del Consejo, ha optado por la pintura. Hasta ahora -cuatro derrotas en cuatro partidos- Angulo argumentaba la nula reacción del equipo desde su llegada en que necesitaba centímetros dentro. Hoy los tendrá con el gigantón Woods (2'18) que debe protagonizar un interesante duelo con Weis aunque el americano lleva un mes y medio sin jugar.
La llegada de Woods ha significado el sacrifico del veterano Lewis que era el segundo más valorado y anotador del equipo. Angulo ha preferido al joven base americano, Green, a quien incluso ha concedido la titularidad. Pero su juego es irregular e imprevisible.
Como no podía ser de otro modo, el club ha vendido el partido de hoy como la gran final de la temporada hasta el momento dada la trascendencia de la victoria, el mismo mensaje de los partidos precedentes. El CAI, como el Menorca, se va a jugar sus opciones de salvación en casa, de ahí la importancia de este enfrentamiento directo para ambos.
El CAI sabía que esta delicada situación en la que se halla era el equipo, podía darse pero nadie creía que fuera a suceder, de ahí la tensión y el pánico con que se vive este momento de la Liga.
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