Weis. El nuevo pívot del Menorca, de brazos enormes se dispone a dejar una bandeja con la oposición de Savane en el partido de ayer

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Miguel Juan Urbano Maó
Realidad cruel es que el ViveMenorca hinchó ayer su peor racha desde que habita en la ACB al amontonar la novena derrota consecutiva (64-67), que le engancha en la penúltima posición, o sea, en zona de descanso. Fue su rival imposible de la Liga junto al Real Madrid, el Kalise Gran Canaria, quien se llevó el botín una vez más de Bintaufa porque dispone de un entrenador sabio, Salva Maldonado, y un equipo profundo y plural con Savané y English como figuras más rutilantes.

Pero si esa realidad es incuestionable, tampoco lo es la sensación más prometedora que destiló el Menorca de Javier Imbroda. Cuanto menos el de Melilla restañó el manual defensivo que paseó el equipo durante muchos partidos de la primera vuelta, reactivó el juego interior con el debut plausible de Weis y el equipo, al fin, volvió a tener una posibilidad de ganar o de forzar la prórroga en la última acción. Funcionó la defensa, sí, pero el ataque se mantuvo desconectado del partido salvo la inspiración de Jeter. Con 2 triples de 21 intentos es prácticamente un ejercicio utópico llevarse la victoria. El tiempo apremia tanto como la clasificación y esta vez los rivales directos hicieron más traumática la derrota porque ganaron.

Las señas de identidad del nuevo ViveMenorca de Imbroda coincidieron con las anteriores, de entrada. Es decir, un quinteto muy intenso que marcaba territorio con un juego más físico que otra cosa. Esa intensidad, sin embargo, le costó dos faltas al capitán Stojic en la enrevesada tarea de sujetar al cañonero canadiense del Gran Canaria, English.

Otra vez en la pintura el equipo de Maldonado halló un pasadizo amplio por el centro que le reportó un par de canastas fáciles para ponerse por delante a 6'07 (7-9). Imbroda había sentado al capitán y Faison defendía ahora a English pero era Eley quien mejor se manejaba en la zona contraria. Con 11-13 en el marcador Imbroda paró el partido e hizo debutar a Weis. La sola presencia del gigante francés ocupó espacio en la zona y los canarios vieron barrado su cómodo acceso a la canasta. El Menorca, elaborando cada acción ofensiva, conseguía clausurar el cuarto con una renta de cuatro puntos (21-17).

Era un partido equilibrado, duro en el que la urgencia con que lo encaraba el Menorca contrastaba con la seguridad de un rival trabajado. El Gran Canaria restableció el equilibrio en poco más de dos minutos (23-23) con los puntos de Moran. El Menorca tenía problemas arriba pese a la buena dirección de Guzmán en pugna con Mario Fernández. Otro tirón del cuadro mahonés (27-23) y Maldonado que devolvía a pista a Norris, ahora perseguido por Jeter. Stojic volvía cancha y un par de acciones suyas daban de nuevo la renta a los mahoneses (29-23 a 5 del descanso). Los amarillos se aproximaban de nuevo e Imbroda sentaba a Weis por Eley. El partido estaba en un pañuelo que al final del tramo conseguía quebrar English con un triple. El Gran Canaria alcanzaba el ecuador del encuentro con un punto de renta gracias a su pluralidad anotadora aunque el Menorca había jugado mejor (38-39).

Savané y English, dos de las referencias inequívocas de este Gran Canaria resolutivo, tiraron de su equipo en la reanudación del partido. El uno desde la pintura y el otro desde el perímetro dieron alas a los suyos y además restaron recursos al Menorca puesto que el canadiense envíó a Stojic al banco con 4 faltas. Weis volvió a la cancha tras un mal gesto en la rodilla de Eley sufrido pero Imbroda más tarde probó con ambos en pista porque el Gran Canaria mantenía y aumentaba su renta (44-51).

Jeter se las jugaba todas para evitar que los canarios diesen el mazazo definitivo al partido pero desaparecido Bazdaric y con Stojic cargado de faltas sólo el base americano anotaba (8 puntos de los 12 que del Menorca en este tramo) aunque no impedía la ventaja de 6 puntos con la que le Gran Canaria entraba en el tramo decisivo (50-56) gracias a un inspirado Sanders.

La situación empeoró todavía más para los intereses locales cuando el Gran Canaria agarró un parcial de salida de 2-8 en apenas cuatro minutos (52-64) que a la postre ya fue definitivo. El Menorca insistía en su pésimo porcentaje desde la línea de 6'25 pero tampoco anduvo certero bajo la canasta. El Gran Canaria ralentizaba sus acciones ofensivas para hacer suyo el triunfo pese a la intachable actitud de los mahoneses que no cejaron hasta el final. Un par de acciones consecutivas de Stojic plenas de casta pusieron el 61-65 tras un parcial de 9-1 a 27 segundos del final. Un error en el tiro libre de English, dio paso a un triple de Jeter que puso el 64-66 a 16 segundos del final. Y el propio Jeter tras otro tiro libre errado de Norris se jugó otro triple que podía haber empatado el choque a tres segundos del final, pero ese tiro no entró.

"Pese al porcentaje, hemos tenido el tiro para empatar"
Javier Imbroda no pudo vivir su primer triunfo como técnico del ViveMenorca ante su afición. El técnico tuvo un mensaje optimista y destacó su agradecimiento a la grada, "ha estado inmensa, ha dado una lección de cómo se debe apoyar a un equipo hasta el último momento, seguimos por debajo de ellos y estamos en deuda".

Imbroda dijo que "el equipo ha entendido lo que quería, es decir, la defensa porque sólo ella nos puede sacar de esta situación. El trabajo atrás nos ha permitido estar en el partido en todo momento. El 2 de 21 en el tiro de tres fue determinante para no poder derrotar a un equipo de play off como el Canarias". Imbroda lanzó un deseo y dijo que "sólo espero que algún día podamos anotar y sigamos trabajando en esta línea para sacar esta situación adelante". Añadió que "con el porcentaje que hemos tenido, es muy difícil superar a un equipo como éste, aunque tiene mérito dejarlo en menos de 70 puntos, y repito que aun así hemos tenido el tiro para empatar el partido".

Imbroda explicó que "ha habido una obsesión por la anotación y no quiero que esto suceda". Admitió que en el tercer cuarto "ha habido momentos de desconcierto ofensivo. En general hemos ido llevando bien el partido, pero es lo que le pasa a un equipo que está en esta dinámica, falla canastas fáciles y comete alguna precipitación. Hay que seguir, no hay más".

Respecto a Weis dijo que "nos puede ayudar y ya nos ha ayudado hoy, sobre todo en defensa, además facilita el trabajo de Bud y cuando él no está aquello ya no queda como un solar".

Imbroda espera que los días de descanso "les vayan bien a los jugadores para descansar y relajarse con su familia".

Salva Maldonado consideró que el partido "ha sido de baja calidad aunque de mucha emoción. En la primera parte hubo demasiadas pérdidas aunque nos recuperamos en el tercero y cuando parecía que teníamos una ventaja cómoda cometimos demasiados errores y les dimos la oportunidad de disputar el partido. Acabamos sufriendo más de lo necesario". (J. Sicilia)