Quintana llegó a doblar corredores en San Sebastián a poco metros para llegar al estadio de Anoeta - R.Q.

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Rafel Quintana puede presumir de ser actualmente el decimotercer mejor maratoniano de España. Al menos de los más de 2.800 deportistas que se inscribieron ayer en la maratón de San Sebastián que era, a su vez, el campeonato de España. El alaiorense, que debutaba en los 42.195 metros que conforman el recorrido, paró el cronómetro tras 2:24:45 en una marca muy buena aunque lejos de las 2:12:43 con las que el atleta olímpico Carlos Castillejo se impuso en la prueba.

Quintana, que empezó a preparar la competición el pasado mes de junio, protagonizó una buena salida, dosificando sus esfuerzos y enganchándose a un grupo que corría a 3'19 el kilómetro. El trazado, que discurría por las calles más emblemáticas de San Sebastián y que contó con un multitudinario seguimiento de la capital guipuzcoana, pasó por el paseo marítimo de la playa de La Concha.

El corredor del ADA Calvià no acusó en los primeros kilómetros la nueva distancia aunque entrada la competición sufrió problemas intestinales que le obligaron a parar hasta en cinco ocasiones.

En su último parón, el alaiorense perdió al grupo con el que iba y se quedó solo, una situación que en la previa Quintana había admitido que no quería vivir. Sin compañía, el atleta no pudo correr al ritmo que quería y le pasó factura en la velocidad.

Quintana, que acabó visiblemente satisfecho con su primera experiencia en una maratón, vivió especialmente la llegada a meta, ubicada en el emblemático estadio de fútbol de Anoeta. Finalmente, el ritmo de carrera del menorquín fue de 3:26 el kilómetro.

En el podio de los ganadores, Castillejo estuvo acompañado de otro olímpico, Pablo Villalobos (2:13:39) y de Eliseo Martín (2:14:05).