En este sentido el conseller de Energía y Movilidad, Joan Boned, ha precisado que su departamento ha acordado una moratoria desde enero hasta marzo con las empresas energéticas para que no se produzcan cortes a quienes no puedan pagar la factura.
Además, ha señalado que la Dirección General de Energía ha planteado una primera propuesta a los participantes en la Mesa para determinar qué características debe tener un hogar para considerarse vulnerable.
"Ahora se tienen que seguir cruzando datos entre empresas, entidades y asociaciones sociales", ha señalado Boned, que ha expresado que hasta el momento no se hecho un "análisis real" pero que se calcula que haya "un 20 por ciento de ciudadanos en riesgo de pobreza energética".
La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha anunciado que el Plan contra la pobreza energética dispone de un fondo de 200.000 euros de los Presupuestos Generales de la Comunidad de 2016 para ayudar a los afectados y que su Ejecutivo prevé que esta cantidad vaya aumentando tanto con recursos públicos como con fondos de las compañías eléctricas. Cabe destacar que este plan contra la pobreza energética también desarrollará actuaciones de prevención, como campañas informativas, planes de ahorro o planes de ayuda a la rehabilitación energética.
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