El nuevo vicepresidente del ejecutivo balear se ha mostrado convencido de que el nuevo Govern, del que formarán parte PSIB-PSOE y MÉS, «tiene capacidad de gobernar y ha entendido el mensaje de la gente: que todas las fuerzas políticas que queremos este cambio nos entendamos».
Con ocasión del debate de investidura de Francina Armengol (PSIB) como presidenta de Balears, Barceló ha dicho que los ciudadanos exigen un «cambio real» de políticas y no sólo de personas; un Govern al «servicio» de los ciudadanos y no «contra» la gente; y que se decidan aquí, en Balears, todas las cuestiones que afectan a sus ciudadanos.
El líder econacionalista ha asegurado que, con los nuevos gobiernos de pactos que se están configurado en las instituciones, hay unas islas «emergentes: un país de consensos y valores irrenunciables».
Barceló ha planteado diez retos para el nuevo ejecutivo, siendo los dos primeros lograr «la corrupción cero y la transparencia» y la apuesta por los servicios públicos.
En este contexto ha destacado la creación de la Oficina Anticorrupción de Balears y la nueva Conselleria de Participación, Transparencia y Cultura.
En tercer lugar, el ejecutivo apostará por un cambio de modelo económico y, en quinto lugar, la creación de empleos de calidad, así como promover la economía del conocimiento, la innovación y la investigación.
El sexto punto es la creación de una tasa turística, cuya recaudación servirá para mejorar Baleares como destino turístico y su medioambiente.
El séptimo reto es la apuesta por la sanidad pública, ha dicho Barceló, que ha manifestado que no puede haber una sanidad de «dos velocidades»: la privada para los ciudadanos que pueden pagar y la pública para los que no pueden tener seguro privado.
Además, Barceló, como séptimo punto, ha subrayado la importancia de aprobar una renta básica para las familias sin ingresos. «En otras palabras: mientras unos rescatan bancos -en alusión al PP-, nosotros queremos rescatar personas», ha añadido.
Finamente, el próximo vicepresidente del ejecutivo ha apostado como octavo punto de gobierno el incremento de la producción de las energías renovables y el crecimiento urbanístico «cero» -como noveno propósito-.
El «último reto» del Govern será lograr un nuevo sistema de financiación, el reconocimiento de la insularidad por parte de las instituciones europeas y españolas y que el ejecutivo balear pueda decir sobre cómo gasta sus impuestos.
«Somos un pueblo, y para decidir el futuro de este país no podemos dejar que lo decidan por nosotros en Madrid», ha reivindicado.
Barceló ha terminado su intervención con una frase del entrenador del Bayer de Munich, Pep Guardiola: «Si nos levantamos cada día temprano y trabajamos sin reproches seremos un país imparable».
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