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«Estoy muy tranquila». Así aseguró sentirse ayer la consellera d'Educació, Joana Mª Camps, después de que la Assemblea de Docents la haya denunciado ante la Fiscalía por presunta malversación de fondos por sus viajes continuados a costa del erario público a Menorca. «Se demuestra que actúan como un organismo político, más que un organismo docente», lamentó, y recordó que fue su departamento quien entregó la relación de las facturas de sus desplazamientos solicitada por MÉS.

Camps indicó que el Govern «solo paga» los desplazamientos «por motivos laborales» y que, al ser menorquina, conoce muchos alcaldes y asociaciones que requieren reunirse con ella. Subrayó que no estar en Palma, donde está la Conselleria, no significa que no trabaje, y destacó que el Govern «ahorra dinero» ya que en sus viajes a Menorca no paga hotel.

En cualquier caso, considera una «indecencia» tener que justificar lo que hace durante las 24 horas del día, porque «esto no se exige a nadie». Así, aseguró actuar con «total transparencia» y lamentó que los docentes «hayan pasado al ataque personal al no conseguir sus fines por la vía profesional».

Por su parte, los grupos de la oposición subrayaron que cualquier cargo del Govern puede estar en cualquier isla, aunque «debe justificar el trabajo que realiza». En este sentido, los diputados Cosme Bonet (PSIB) y Fina Santiago (MÉS) consideran que la consellera Camps debe dar explicaciones sobre su actividad política en esos desplazamientos.

«No cuestionamos que un cargo se desplace ni que se paguen estos viajes con fondos públicos, pero sí que queremos saber si realmente ha estado trabajando», dijo Bonet.