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EU ha dicho este sábado que sería "un ataque a la economía de Balears" la privatización de AENA y ha considerado que ésta podría suponer la pérdida de rutas y de líneas regulares en algunos aeropuertos de las islas.

Después de que el Consejo Consultivo de Privatizaciones haya realizado un informe favorable a la privatización de AENA, EU en un comunicado ha dicho que el encarecimiento de tasas y una gestión individualizada haría que los aeropuertos de las islas tuvieran que competir entre ellos y que, por tanto, la menor demanda de Menorca y Eivissa, les haría perder competitividad frente a Son Sant Joan y, posiblemente, perder rutas y líneas regulares.

Esta situación, ha dicho, se podría ver agravada si Iberia no se presentara a los concursos de handling, con lo que las islas quedarían "cautivas" de las compañías de bajo coste, "que solo suelen volar a destinos en los que reciben financiación de las administraciones locales, lo que de rebote significaría también competir con otras Comunidades y tener que pasar a subvencionar a compañías privadas que no respetan, en muchos casos, los derechos de los pasajeros y usuarios y los más elementales de sus trabajadores".

EU ha remarcado que el modelo actual de gestión aeroportuaria no cuesta ningún euro a los ciudadanos de Baleares y que el hecho de funcionar en red estatal permite el mantenimiento de aeropuertos deficitarios como el de Menorca. Así, ha considerado que la privatización tendría consecuencias inmediatas de encarecimiento de tasas, lo que restaría competitividad a los aeropuertos de Balears como destino turístico.

EU ha mostrado su solidaridad con los trabajadores de AENA y ha recordado que los costes laborales no suponen más que un 12 por ciento del coste de AENA y ha anunciado que pedirá reuniones con los comités de empresa y los sindicatos para estudiar posibles acciones.

Además, ha reclamado al Govern que paralice la pretensión del Ministerio de Fomento de privatizar AENA ya que supondría poner en manos privadas la puerta de entrada de Balears y, además, un golpe muy fuerte a la economía de las islas, ha opinado.

Finalmente, ha hecho un llamamiento a toda la sociedad para abrir un debate sobre el modelo de gestión aeroportuaria y al conjunto de administraciones, fuerzas políticas, sindicatos, organizaciones patronales y sociedad civil para que se sumen en la defensa de unos aeropuertos públicos que garanticen el servicio público que actualmente dan, la conectividad de las islas y la calidad del servicio.