Sanidad y educación se salvan de los recortes de personal

El Govern adelgazará las empresas públicas dejando de cubrir las plazas por enfermedad y jubilación de interinos y funcionarios de servicios generales

Esencial. La Conselleria de Sanidad sí suplirá las bajas de médicos y enfermeras - Archivo

Ángeles Martín ObispoMaó27/08/11 0:00

Los recortes económicos que el Govern prepara en la Administración autonómica no afectarán al personal de servicios esenciales como sanidad y educación. Fuentes de la Conselleria de Administración Públicas confirmaron ayer que la intención del Ejecutivo autonómico es adelgazar las empresas y entes públicos que gestiona la Comunidad dejando de cubrir las plazas por enfermedad, maternidad o jubilaciones de personal interino y funcionarios de "servicios generales", a excepción de educación y salud, cuyo personal se rige por un régimen estatutario. Las mismas fuentes explicaron al respecto que el Govern descarta la convocatoria de nuevas ofertas de empleo público para cubrir bajas por jubilación que no afecten a servicios esenciales. Tampoco se cubrirán las bajas laborales, ni se renovarán los contratos de interinos de temporada.

La decisión de adelgazar la administración de las cargas laborales que soporta en la actualidad ya había sido puesta sobre la mesa por el Gobierno de Antich en 2010 y reclamada años antes de forma reiterada por la Sindicatura de Cuentas de Balears. El ex conseller balear de Economía y Hacienda, Carlos Manera, incluso anunció su intención de reducir a una treintena los entes públicos autonómicos. Sin embargo, a día de hoy, Balears cuenta con 166 empresas públicas con algo más de 7.000 trabajadores, legado que el Gobierno de Bauzá se ha propuesto recortar.

Sanidad y educación serían la excepción. Fuentes de la Conselleria de Educación afirmaron ayer que este departamento sí cubrirá las bajas por jubilación. Por su parte, la consellera de Sanidad, Carmen Castró, remarcó recientemente en Menorca que su departamento no pondrá en práctica los recortes del Plan de Saneamiento Económico y Financiero diseñado en su día por el Ejecutivo de Antich para la sanidad pública Balear. Dicho plan contemplaba entre otras cuestiones el despido de 1.700 trabajadores de la sanidad hasta finales de año y no sustituir las bajas de médicos y enfermeras de Primaria.