TW
0

El presidente del Govern, Francesc Antich, ha apelado a un "gran consenso" entre las distintas fuerzas políticas de las islas de cara a sacar adelante la Ley de la Buena Administración y del Buen Gobierno, que ya está elaborada aunque aún debe recibir el visto bueno del Consell de Govern y ser aprobada por el Parlament, con el objetivo de mejorar la gestión llevada a cabo desde las Administraciones públicas e incentivar para ello a sus funcionarios.

En este sentido, Antich ha recalcado la necesidad de poner sobre la mesa iniciativas que procuren "más transparencia" en el quehacer de las instituciones así como "una mayor eficacia y eficiencia". "Es muy necesario que haya la máxima implicación por parte de todos después del mal funcionamiento detectado de la pasada legislatura", ha enfatizado el jefe del Ejecutivo autonómico.

Así lo ha expresado durante la visita que ha efectuado al centro para discapacitados Joan Crespí, donde, preguntado acerca de qué partida servirá para pagar incentivos de hasta 500 euros a los funcionarios que mejoren su rendimiento, tal y como prevé esta normativa, ha señalado que "por el momento no se ha transformado en Ley y para cuando ello suceda, deseo de todo corazón que ya no estemos en crisis".

"Las Leyes son instrumentos de futuro y no sólo se plantean en base al momento presente", ha recalcado Antich en referencia a esta nueva normativa, que podría ser aprobada este viernes en Consell de Govern, para después pasar a ser tramitada en la Cámara autonómica. Con ella, Baleares se convertiría en una de las regiones pioneras en aplicar incentivos a los funcionarios que más rinden en sus respectivos puestos de trabajo.