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Cuando vendemos una vivienda, tenemos que satisfacer una serie de impuestos de manera obligatoria, ya que es probable que se produzca una ganancia patrimonial ante la que hay que responder a Hacienda.

Tal y como recoge en un reportaje el portal especializado en vivienda Idealista, el vendedor tiene que afrontar el pago del IRPF, la plusvalía municipal (cuando exista) y el IBI.

Si se ha producido una ganancia, tenemos que declararla en nuestra declaración de la renta, siempre y cuando se haya producido un incremento en nuestro patrimonio. Si no se ha producido, aunque no se pague, habrá que registrarlo en la declaración.

Si obtienes una ganancia patrimonial, esta deberá incluirse en la base imponible del ahorro, tributando:

  • Al 19% hasta los 6.000 euros.
  • Al 21% para el tramo entre los 6.000 y los 50.000 euros.
  • Al 23% de los 50.000 euros a los 200.000.
  • Al 27% desde los 200.000 hasta los 300.000 euros.
  • Desde los 300.000 euros en adelante, el tipo aplicable será del 28%.

Para calcular la ganancia patrimonial debes conocer el valor de transmisión (restando todos los gastos y tributos abonados con la venta), así como el de adquisición (sumando los gastos asumidos en aquel momento, incluyendo obras y mejoras).

Puedes evitar pagar a Hacienda, puedes lograrlo acogiéndote a la reinversión en vivienda habitual, aprovechar la exención en caso de venta de vivienda en mayores de 65 años o la entrega de vivienda como dación en pago, que también se encuentra exenta.

Otro impuesto que hay que satisfacer es la plusvalía municipal, que grava el aumento de valor que ha experimentado el inmueble durante el tiempo en que te ha pertenecido, por lo que solo deberás abonarlo en aquellos casos en que efectivamente se haya producido un aumento de valor.

Por último, está el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles), que corresponde abonarlo al propietario del inmueble en la fecha de devengo del impuesto, aunque lo habitual es repartirlo entre vendedor y comprador, prorrateando su coste anual teniendo en cuenta la fecha en que se produzca la compraventa.