Familiares y amigos de Aga Khan IV viajaron hasta Lisboa este fin de semana para dar el último adiós al líder musulmán, entre ellos, el rey Juan Carlos I, que se trasladó desde desde Abu Dabi.
Los actos para despedir al imán comenzaron a las 11.00 horas de este sábado en el Centro Ismaelita de la ciudad con una misa-funeral. Por su parte, el monarca español llegó en coche y se mantuvo reservado mientras entraba al edificio junto a su bastón.
Juntos en un internado suizo
La relación de amistad de Aga Khan IV y el padre de Felipe VI se remonta a cuando eran pequeños, momento en el que estudiaron juntos en un internado suizo que se ubicaba en Friburgo. Otras personalidades acudieron a la despedida del fallecido, como el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, o Justin Trudeau, primer ministro de Canadá.
Como indica la cultura ismaelita en cuanto a un momento de luto, las mujeres presentes vistieron con prendas blancas y mantenían su cabeza cubierta. El féretro también fue cubierto por una sábana blanca y rodeado por algunas de las personas más allegadas, entre las que se encontraba Juan Carlos I.
Tras finalizar la misa, Aga Khan IV ha sido trasladado a Asuán (Egipto) desde la base militar de Lisboa Figo Maduro. El imán sería enterrado en la ciudad egipcia este domingo.
Mientras el monarca español se encontraba en Portugal, la reina Sofía viajaba a Atenas, acompañada por Irene de Grecia y la infanta Cristina, para asistir a la boda de Nicolás de Grecia, su sobrino, y de Chrysi Vardinogianni.
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