Imagen de la Policía e tareas de rescate | Policía Nacional

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Un agente de la Policía Nacional destinado en la Comisaría de distrito de Patraix (Valencia), rescató el pasado día 29 de octubre sobre las ocho de la tarde, a una mujer y a su hija de unos 5 años de edad, que se encontraban atrapadas en el interior de un coche que se estaba inundando de agua tras el desbordamiento del barranco que atraviesa la localidad valenciana de Alfafar.

Según explica la Jefatura Los hechos ocurrieron el fatídico martes 29 de octubre sobre las ocho de la tarde en la localidad de Alfafar, cuando un agente de Policía Nacional destinado en la Comisaría de distrito de Patraix u y que en ese momento se encontraba fuera de servicio localizó a dos personas en el interior de un vehículo atrapadas por el torrente de agua que se había desbordado a causa de la DANA.

El agente, que regresaba a su domicilio tras terminar su turno de trabajo, se vio atrapado en su propio vehículo al verse sorprendido por la crecida de agua que inundó las calles del municipio y que ocasionó el atasco de numerosos vehículos con personas en su interior.

Una vez que el policía consiguió abandonar su coche para resguardarse en el techo, localizó a una mujer que pedía ayuda a gritos mientras golpeaba su vehículo, ya que el agua le impedía abrir la puerta para abandonar el coche, motivo por el cual se dirigió rápidamente al lugar con el fin de auxiliarla.

A su llegada, encontró a una mujer intentando abrir desesperadamente la puerta de su coche para poder salir junto a su hija, una niña pequeña.

El agente rompió la ventanilla con una navaja que portaba un accesorio para fracturar el cristal y consiguió sacarlas del vehículo y trasladarlas hasta un lugar seguro junto a un quitamiedos de la calzada que se encontraba ya anegada. El nivel del agua les llegaba ya por encima de la cintura.

Tras varios minutos de espera, el policía observó un camión que todavía conseguía transitar por la carretera, alertó al conductor con gritos de ayuda y consiguió subir a bordo de la cabina a la madre y a su hija, quedándose él fuera ya que en el interior se encontraban numerosas personas y no había espacio para más.

Además de esta primera intervención, el agente se mantuvo durante más de cinco horas por las inmediaciones colaborando con el resto de servicios de emergencia que se encontraban en el lugar, auxiliando a personas así como dando instrucciones de seguridad para mantener a la gente a salvo en zonas seguras.