El Gobierno crea una comisión para analizar la acogida de refugiados

En rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Sáenz de Santamaría ha avanzado que por acuerdo del Gobierno, ella presidirá el grupo de trabajo de esta comisión que abarca a los «muchos» ministerios implicados en la respuesta a los refugiados y que se reunirá en plenario el próximo lunes.

«Desde julio, pero muy especialmente en estos días, los europeos hemos vivido momentos muy complicados y difíciles que han generado una gran alarma. Somos muy conscientes de que tenemos que responder con la máxima unidad, responsabilidad, capacidad de cooperación y solidaridad en este asunto», ha señalado.

La «primera decisión» de esta comisión interministerial ha sido encargar a la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, de quien depende el sistema de acogida de solicitantes de asilo, que convoque la citada Conferencia Sectorial de Inmigración para que se reúna la próxima semana, según ha explicado Sáenz de Santamaría.

«Se trata de trabajar todos juntos de cara a ver qué capacidades tenemos, cómo podemos articular el sistema, porque el asilo es un régimen de derechos muy especial con una serie de garantías, respetando la legalidad internacional y conscientes de que en este asunto serán muchas las fases para llevar a cabo», ha apuntado.

Ciudades refugio

Preguntada sobre la proliferación de municipios que se han declarado 'Ciudades Refugio' siguiendo la propuesta de consolidar una red impulsada por la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, la vicepresidenta ha dicho que «por eso precisamente una de las primeras decisiones es convocar inmediatamente a la Conferencia Sectorial».

«Este es un asunto en que todas las administraciones tenemos que trabajar coordinadamente, porque no es un problema de hoy ni de mañana, sino que vamos a tener que gestionar en el corto medio y largo plazo (...) Lo que vamos a hacer es poner en común las capacidades que tenemos todas y cada una de las administraciones. Esta tiene que ser una política de Estado», ha destacado.

La vicepresidenta ha incidido en la complicación del sistema de asilo, «una de las políticas más difíciles de gestionar» y con particularidades en tema de garantías, derechos y estatus que todos los actores implicados «tienen que conocer» para poder dar una respuesta desde una «visión responsable, solidaria y ordenada» que se mantenga también en el medio y largo plazo.

«Queremos articular un sistema de acogida, que es un asunto de gestión difícil donde no son sólo los ofrecimientos actuales sino el cómo somos capaces de articularlo con una verdadera integración de las personas que pueden llegar a nuestro país de una manera ordenada», ha señalado la vicepresidenta.

En esta línea, ha incidido en que «no es sólo cuestión de hoy ni de mañana». «Todavía estamos pendientes del procedimiento que permitirá el reasentamiento y la reubicación de las decisiones que tomamos en julio. Lo que queremos es que todas las administraciones españolas vayamos juntas, ordenadamente», ha apostillado.

Las cifras, en el próximo consejo europeo

En cuanto al número de personas a acoger, Sáenz de Santamaría no ha concretado, aunque tras recordar que en el primer acuerdo este verano España se ofreció a reasentar o reubicar a 2.739 personas, ha afirmado que «ahora hay otras cifras». Con todo, es partidaria de «construir la casa desde los cimientos».

«Va a haber un próximo Consejo Europeo, vamos a analizar las distintas administraciones qué capacidades tenemos, porque no es sólo la acogida en este momento, que es muy duro y muy crítico, es que luego hay que saber cómo ofrecemos un futuro y una integración dentro de nuestra sociedad», ha señalado.

De hecho, preguntada por las 4.800 personas que el PSOE, en línea con la primera petición a España de la Comisión Europea, pide al Gobierno que acoja, la vicepresidenta ha pedido que se eviten «frases fáciles en problemas difíciles». «Con las cifras que ya estan dando la Comisión Europea o Naciones Unidas, fíjese dónde queda la cifra del PSOE», ha comentado.

A los socialistas les ha dirigido un llamamiento a la «responsabilidad desde la solidaridad». «En el pasado, hablo de hace muchos años, he hablado de estos temas con algún dirigente socialista. Espero que ahora lo tratemos de la misma manera. Conocen el problema porque a mi antecesora en el cargo también le tocó gestionar alguna cuestión difícil. Hagamos política de Estado, política europea y si me apuran, para solucionar de raíz los conflictos de los que deriva lo que estamos viviendo, mayor liderazgo mundial», ha apostillado.

Cooperación en origen

Al margen de estas gestiones a nivel nacional, el Gobierno seguirá manteniendo la misma posición en la Unión Europea, con la reclamación de una política común de asilo y migraciones, y se trabajará con las instituciones europeas «para determinar cuáles son los procedimientos y la forma de gestión de un problema que es global».

España va a pedir también a la Comisión la puesta en marcha «cuanto antes» del programa anunciado de 1.000 millones de euros para «con una política de inversiones y de creación de empleo», cooperar con los países de origen de migraciones económicas. «Entendemos que en este tema que es europeo y en el que todos tenemos que demostrar solidaridad, es bueno que vayamos todos juntos mediante un sistema de cooperación en origen complementando mucho el presupuesto europeo para estas materias», ha explicado.