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El presidente de Repsol, Antonio Brufau, aseguró ayer que la petrolera "sí cree en la justicia", mientras la compañía sigue recabando apoyos públicos y privados en España y en el mundo contra la expropiación del 51 por ciento de YPF.

Durante la inauguración de una refinería en Cartagena (Murcia), Brufau afirmó que Argentina "deberá pagar el justiprecio por YPF, con una valoración que no hará (Axel) Kicillof (el viceministro argentino de Economía), quien de valorar empresas no sabe mucho", después de que anunciara una "revisión" del valor de YPF, estimado por Repsol en 8.000 millones de euros.

"Repsol sí cree en la justicia, no como otros, que prueba han dado de ello. Los tribunales son tercos y no responden a la demagogia, sino a las valoraciones", añadió.
A estas declaraciones se les suma el mensaje "de tranquilidad y continuidad" que envió Brufau a sus trabajadores, a los que les reiteró que la expropiación no afecta a la viabilidad de los proyectos de la compañía, que controla el 57,4 por ciento de YPF.

La misiva de Brufau contrasta con la opinión de la agencia de calificación crediticia Moody's que, a la luz de los acontecimientos, ha puesto a la petrolera española en perspectiva negativa para una posible rebaja de su calificación, situada en un "Baa2" (aprobado).

Apoyo del Príncipe

Repsol continúa recibiendo apoyos, como el del Príncipe Felipe, quien ayer durante la inauguración de la refinería de Repsol - con una inversión industrial de más de 3.000 millones de euros- agradeció a la compañía "todo lo que hace y ha hecho, que es mucho, por el bienestar de numerosos países", pese a no referirse en concreto a la crisis de YPF.

Por otro lado, el Ejecutivo español quiere que del próximo Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la UE salga una resolución que lleve ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) las prácticas de Argentina.

Además, la Comisión Europea ha cancelado las reuniones que su delegación debía mantener la semana próxima con empresarios de Argentina para fomentar las inversiones mutuas ante la falta de un clima adecuado tras los últimos acontecimientos.
Otro apoyo ha provenido de los ciudadanos españoles, que rechazan en un 82,6 por ciento la decisión de expropiar YPF y que han hundido a Cristina Fernández en su valoración de un 5 hace un mes a un 3,4 después de decretar la intervención, según datos del centro de análisis Real Instituto Elcano.