Víctimas de productos bancarios de riesgo reclaman sus ahorros

Según la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (ADICAE), convocante del acto, unas 500 personas se manifestaron ante la sede del Banco de España para pedir que se hagan líquidas sus inversiones en lo que consideran "productos tóxicos" y donde incluyen junto a las participaciones preferentes otros productos complejos de ahorro. Según explicó el presidente de ADICAE, Manuel Pardos, se trata de productos de "gran complejidad y con muchos riesgos" sobre los que no se informó adecuadamente a los consumidores, en su mayoría de avanzada edad, y que ahora no pueden recuperar sus ahorros a no ser que acepten canjes y condiciones "abusivas".

Para Pardos, las concentraciones de ayer, realizadas también en otras ciudades como La Coruña, sirven para denunciar la situación de los afectados y alertar a otros consumidores. La asociación reclama soluciones tanto a las entidades que han ofertado estos productos -entre las que citan a CaixaBank o Bankia-, como a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) o el Banco de España.

ADICAE prevé convocar nuevas manifestaciones el próximo 3 de marzo en las principales ciudades de España y ha anunciado una serie de demandas contra las entidades bancarias. Según la plataforma, que reúne a 30.000 afectados, hay más de un millón de familias "víctimas" de estos productos, que suman 30.000 millones en depósitos.

Otro centenar de personas afectadas por productos bancarios de riesgo, como participaciones preferentes o inversiones de rentabilidad no garantizadas, se han concentraron en la plaza de Sant Jaume, en Barcelona, y reclamaron que las entidades financieras les devuelvan su dinero.

Con pancartas como "Tu banco te engaña" o "Engañan a sus clientes para robarles sus ahorros", los manifestantes entraron en el Palau de la Generalitat, aunque inmediatamente fueron desalojados por los Mossos d' Esquadra. El portavoz de ADICAE en Barcelona, Gianfranco Pani, explicó que la mayoría de afectados por estos productos son gente mayor que creía que invertía su dinero en depósitos de plazos fijo sin ningún riesgo y ahora ha descubierto que los productos contratados son de alto riesgo y no pueden recuperar su inversión.