"Preferimos tener un empleo temporal antes que un parado"

La norma aprobada, en contra de lo esperado, no aborda cambio alguno en materia fiscal, según confirmó el propio ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco. Además, aunque en principio contemplaba que la duración del nuevo contrato de formación iba a ser de dos años y prorrogables a otro más, finalmente el Ejecutivo ha decidido establecer una duración mínima de un año y de dos como máximo, prorrogable por otro año más si el proceso formativo lo exige.

Según aseguró Blanco, este decreto es una "prioridad nacional", pues el objetivo es crear empleo, sobre todo para los jóvenes que abandonaron sus estudios para trabajar en el sector de la construcción. "Ofrece presente y futuro", dijo en relación al nuevo contrato de formación el portavoz, que compareció junto al ministro de Trabajo.

Además de las medidas citadas anteriormente, la norma aprobada prorroga hasta 2013 el pago por el Fogasa de parte de las indemnizaciones por despido, aunque solo en los casos de despidos procedentes. También retrasará al primer semestre de 2013 el desarrollo de un proceso negociador para implantar el fondo de capitalización acordado por Gobierno y agentes sociales.

Al mismo tiempo, establece que en el plazo de seis meses, a partir de su entrada en vigor, habrán de tomarse las medidas necesarias para integrar el Servicio Público de Empleo Estatal y el Fogasa en un único organismo. Además prorroga, hasta finales de 2013, el periodo para poder transformar contratos temporales en fijos siempre que su duración no exceda de seis meses.

Sostener el empleo

Para el ministro de Trabajo, la política laboral "no puede ser la misma" en etapas de expansión que en etapas de crisis, ya que debe proporcionar más flexibilidad a las empresas y proteger, en paralelo, a los trabajadores.

"En crisis, lo importante es sostener el empleo, sin cualificarlo, sea temporal o indefinido, pero preferimos tener un empleo temporal antes que un parado", afirmó Gómez, que insistió en que la regla que limita la concatenación de contratos temporales "funciona mucho mejor en épocas de auge".

La norma deja en suspenso durante dos años el artículo 15.5 del Texto Refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores, en el que se establece que adquirirán la condición de fijos aquellos trabajadores que en un plazo de treinta meses hubieran estado contratados durante más de dos años, con o sin solución de continuidad, para el mismo o diferente puesto de trabajo con la misma empresa o grupo de empresas mediante dos o más contratos temporales.

El Gobierno justificó esta medida en que el límite actual al encadenamiento, "lejos de fomentar la contratación indefinida", puede estar produciendo "efectos indeseados" de no renovación de contratos temporales.

"Se suspende, no se elimina esta regla. Se ha considerado de forma crítica estos días, pero me gustaría subrayar que es una medida que está concebida para sostener el empleo (...). En este momento de destrucción de empleo está obstaculizando el mantenimiento del empleo, aunque sea temporal, en las empresas e incluso en el sector público", alegó el ministro de Trabajo.

En cuanto al nuevo contrato de formación y aprendizaje, se podrá realizar con jóvenes de entre 16 y 25 años que carezcan de cualificación profesional alguna. No obstante, de manera transitoria, hasta el 31 de diciembre de 2013, esta modalidad contractual también podrá efectuarse con jóvenes de hasta 30 años sin cualificación profesional.