TW
0

La agencia Fitch confirmó ayer la calificación de la deuda a largo plazo de la Caja Mediterráneo (CAM) como "bono basura" y, tras destacar su alto riesgo de impago, aplaudió su intervención y su posible venta a una entidad "más fuerte", lo que beneficiaría a sus acreedores.

En un comunicado, Fitch también anunció que ha bajado la viabilidad de la entidad hasta "CCC", nota "muy pobre", y mantuvo la deuda a largo plazo en "BB+", calidad cuestionable.

La calificación a corto plazo se sitúa en "B" (calidad pobre) y la deuda avalada por el Estado en "AA+" (calidad superior).

El pasado abril, la agencia de medición de riesgo rebajó tres escalones la deuda a largo plazo de la CAM, hasta el nivel de "bono basura" a causa del fracaso de su proyecto para crear Banco Base con Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura.

La rebaja de la CAM reflejaba la ayuda externa que necesitaría la entidad dado su bajo nivel de recursos propios en un contexto de deterioro de los activos, en un momento en el que el Banco de España había aumentado sus requerimientos de capital a las entidades.
Fitch destacó ayer que estas calificaciones pasan ahora al Banco CAM, al que se segregaron los activos y pasivos de Caja Mediterráneo, salvo los de la Obra Social, si bien señala que la entidad ha sido colocada en "previsión positiva" debido a la posibilidad de que acabe siendo adquirida por otra entidad "más potente", lo que beneficiará a los acreedores.

La CAM fue intervenida por el Banco de España el pasado viernes y sus cuotas participativas bajaron hoy en Bolsa un 5,73 %.

La agencia recuerda que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) controla ahora la CAM y el Banco CAM, y que el supervisor, tras la recapitalización de la entidad alicantina, abrirá un proceso para designar la mejor opción para su venta, circunstancia que valora Fitch a la hora de juzgar las perspectivas futuras de la entidad.

La deuda de Banco CAM tiene la nota de "CC" (cercana a la insolvencia), si bien está sujeta a posibles calificaciones de mejora si es vendido a una entidad mejor calificada, así como a descensos si la operación no se ultima.

Además, sus participaciones preferentes han sido calificadas con la notas "C" (rozando la insolvencia), aunque señala que mejoraría en cuanto se cierre su venta.

Fitch recuerda la elevada exposición de la CAM al sector inmobiliario.