Josep Antoni Duran i Lleida y Artur Mas durante un mitin celebrado ayer - Reuters

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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, acució ayer al nacionalista Artur Mas a un debate "cara a cara" con el candidato del PSC, José Montilla, con la mirada puesta en las elecciones del domingo, al tiempo que arremetió contra PP y CiU por su discurso sobre inmigración.

Ante unas 1.500 personas, Zapatero intervino ayer en Lleida en la campaña electoral del PSC para los comicios catalanes del próximo domingo y pidió el voto para los socialistas, a fin de seguir avanzando en una España "progresista y moderna", que ponga freno "a esos discursos que copian del 'Tea Party' o a esos vídeos que copian de la derecha más extrema de Europa".

Desde su óptica, en Cataluña "se sabe bien quién es firme frente a la derecha extrema, quién pone coto y combate la xenofobia, quién es radical en favor de la libertad y la igualdad de los ciudadanos", porque "quien habla claro siempre en este terreno es el PSOE".

Zapatero jalonó toda su intervención con alusiones a la negativa del candidato de CiU, Artur Mas, de participar en un debate con Montilla y emplazó a los catalanes a votar el próximo domingo a quien "se atreve a debatir cara a cara con su rival y tiene capacidad de confrontar sus ideas", en referencia al aspirante socialista. "Si tan seguro está, si tan fuerte se siente, que vaya a debatir con Montilla", urgió a Mas.

También quiso denunciar con toda su "contundencia y firmeza" los gestos e imágenes que en esta campaña han protagonizado partidos como PP y CiU al utilizar la inmigración como arma electoral. "Yo no sé si da votos (...), pero me da igual; son nuestros principios y es nuestra conciencia de defensa de todos los seres humanos en igualdad de condiciones", incidió Zapatero, quien se identificó con "los valores democráticos más avanzados, los que han permitido paso a paso una conquista de derechos de la ciudadanía, de libertades individuales, del espíritu de concordia para la convivencia".

Por eso, frente al discurso de CiU y PP contrapuso los ideales de los socialistas. "A eso no nos gana nadie; no nos ha ganado nadie en 30 años de democracia", apostilló.

Así las cosas, se mostró convencido de que "un pueblo avanzado" como el catalán no va a tolerar que se utilice este asunto "por la dignidad de España y por la dignidad de los seres humanos". Con estas palabras Zapatero se refirió al polémico videojuego diseñado por los jóvenes del PP, en el que se lucha contra la inmigración ilegal, pero también a unas declaraciones del portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, quien instó a los inmigrantes a asumir los valores de la catalanidad.

Precisamente a Duran quiso decirle que "los hijos de los inmigrantes son tan hijos como los de las personas que han nacido aquí".