Uniformes y material militar abandonados en mitad de la ofensiva rebelde. | Reuters - Arlette Bashizi

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La situación en la República Democrática del Congo se ha tornado crítica debido a la reciente ofensiva rebelde en la ciudad de Goma y sus alrededores. El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha expresado gran preocupación por el uso de artillería en zonas densamente pobladas, lo que ha causado una devastación significativa para las poblaciones civiles así como heridos y víctimas mortales entre personas que no están implicadas de forma directa en los enfrentamientos violentos.

Desde el comienzo del conflicto en enero, el CICR ha atendido a más de 600 personas heridas, casi la mitad de ellas civiles, incluyendo una alta proporción de mujeres y niños. Esto se debe a la intensificación de las hostilidades, que ha llevado a un aumento en las víctimas por balas y explosivos.

Impacto en las instalaciones médicas

El hospital CBCA Ndosho de Goma, apoyado por el CICR, ha recibido una afluencia masiva de heridos, con equipos médicos trabajando sin descanso. «Algunos heridos son trasladados en motocicleta, otros en camionetas o bien con ayuda de voluntarios de la Cruz Roja de la República Democrática del Congo», explica Myriam Favier, jefa de la subdelegación del CICR en Goma. Los heridos llegan con graves lesiones de bala o metralla, y la falta de espacio obliga a muchos a esperar en el suelo.

El uso de artillería ha afectado a grandes centros urbanos y campamentos para desplazados. En el campamento de desplazados de Rusayo, varias personas civiles perdieron la vida pese a ser un área protegida bajo el derecho internacional humanitario. «Es imperioso que las partes en conflicto respeten el derecho internacional humanitario, velando constantemente por preservar a la población civil», señala François Moreillon del CICR.

Acceso humanitario y protección del personal médico

El CICR ha recibido numerosos llamados de personas heridas y desorientadas, siendo crucial habilitar un acceso seguro con fines humanitarios para garantizar agua potable, alimentos y atención médica en una zona urbana que aglutina a más de dos millones de personas. La organización internacional exige respeto y protección para el personal médico e instalaciones de salud, y solicita facilitar la circulación de ambulancias y heridos.

El CICR es una organización humanitaria neutral e independiente, y su misión consiste en proteger y asistir a las víctimas de conflictos armados y situaciones de violencia, basándose en los Convenios de Ginebra de 1949. Su trabajo se centra en preservar la vida y la dignidad humana.