La bufanda no es tan efectiva como creíamos. | Freepik

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Con la llegada del invierno en España, es común ver a personas abrigándose el cuello con bufandas para proteger su garganta del frío y evitar dolores o problemas. Sin embargo, según expertos en otorrinolaringología, este hábito no tiene un efecto real en la prevención de afecciones de garganta.

Aclaran que lo que comúnmente se denomina "afonía" en esta época del año es en realidad una disfonía, un trastorno de la voz caracterizado por ronquera. Las principales causas de la disfonía invernal son los catarros virales o infecciones bacterianas que irritan o inflaman las cuerdas vocales.

Factores de riesgo y prevención

Además del frío, otros factores que pueden ocasionar disfonía son el tabaco, el abuso vocal en profesionales que hablan durante mucho tiempo, y la exposición a contaminantes o ambientes tóxicos. Para prevenir estos problemas, el doctor Casado recomienda evitar los factores de riesgo, especialmente el tabaco, y respirar siempre por la nariz, ya que esta actúa como un filtro natural que calienta, humidifica y limpia el aire antes de que llegue a la garganta.

Y es que taparse la garganta con una bufanda no evita las infecciones por virus ni afecta directamente a la garganta, sino que simplemente ayuda a sentir menos frío. En caso de disfonía, la mayoría de las veces se resuelve espontáneamente en 4-5 días con métodos naturales como propóleo o equinácea, o con medicamentos como paracetamol o ibuprofeno.

Cuándo acudir al especialista

Es importante acudir a un otorrinolaringólogo si un trastorno de la voz dura más de dos semanas, o a los 10 días en el caso de los fumadores. Aunque la disfonía suele ser un proceso banal, en fumadores puede ser un indicio temprano de cáncer de laringe, que tiene buen pronóstico si se diagnostica a tiempo.