¿Qué tiene de cierto que el estrés hace crecer las canas? La ciencia responde

El papel de las células madre melanocíticas

El color del cabello está determinado por melanocitos, células que producen melanina, el pigmento responsable de la tonalidad capilar. Estas células se originan a partir de células madre melanocíticas ubicadas en los folículos pilosos. Con el tiempo, y debido a diversos factores, estas células madre pueden disminuir o desaparecer, lo que resulta en la pérdida de pigmentación y la aparición de canas.

El impacto del estrés en la pigmentación capilar

Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Harvard, publicado en la revista Nature, ha explorado cómo el estrés afecta a las células madre melanocíticas. Los experimentos, llevados a cabo en modelos animales, mostraron que el estrés induce la liberación de noradrenalina, un neurotransmisor asociado con la respuesta de "lucha o huida". Esta sustancia, al entrar en contacto con los folículos pilosos, provoca la activación excesiva de las células madre melanocíticas, llevándolas a diferenciarse en melanocitos de manera prematura. Como resultado, se agota la reserva de células madre, impidiendo la regeneración de melanocitos y causando la despigmentación del cabello.

Implicaciones y consideraciones

Aunque el estudio se centró en modelos animales, los investigadores sugieren que mecanismos similares podrían estar presentes en humanos. Estos hallazgos proporcionan una base científica para la relación entre el estrés y la aparición de canas, aunque es importante considerar que otros factores, como la genética y el envejecimiento natural, también juegan un papel crucial en la pigmentación capilar.

Estrategias para mitigar el impacto del estrés

Dado que el estrés puede influir en diversos aspectos de la salud, incluyendo la aparición de canas, es recomendable adoptar prácticas que ayuden a gestionarlo eficazmente. Técnicas de relajación, ejercicio regular, una alimentación equilibrada y mantener una adecuada higiene del sueño son medidas que pueden contribuir a reducir los niveles de estrés y, potencialmente, su impacto en la salud capilar.