Cayetano Martínez de Irujo se reconcilia con su familia

A pocos días de que se cumplan seis años del fallecimiento de su madre, el 20 de noviembre de 2014, el conde de Salvatierra ha revelado a Look que el pasado domingo mantuvo una larga conversación con su hermano mayor para firmar la paz. «Carlos y yo lo hemos hablado a fondo y lo hemos solucionado todo», ha contado al citado medio.

Tal y como ha explicado el jinete de equitación, los Alba han pasado página después de una charla de «hora y media», pues «así como se arreglan las cosas». «Carlos llevaba un año llamándome y muy amable. Felicitándome por intervenciones mías en programas de televisión», ha confesado.

En su entrevista a Un año de tu vida, Cayetano Martínez de Irujo no pudo contener las lágrimas al hablar de la Duquesa de Alba. Fue en ese momento cuando afirmó que la relación con sus hermanos se había enfriado. Sin embargo, pasados unos meses, Eugenia Martínez de Irujo contó a Europa Press que las cosas con su hermano estaban «muy bien», lo que hizo pensar que la situación había mejorado.

La tensión entre los hermanos comenzó tras la muerte de Cayetana de Alba. Su hijo Carlos, el xix duque de Alba de Tormes, se asentó en el Palacio de Liria, lo que provocó la marcha de Cayetano tras cincuenta años viviendo en el que había sido su hogar. «Cuando murió mi madre todo cambió para mí, esperaba más generosidad por parte de mi hermano Carlos, el actual duque de Alba; pero no se produjo y tuve que irme del palacio de Liria», contó en aquel entonces.

No obstante, fue la publicación de su libro autobiográfico en 2019 lo que provocó que sus hermanos, a excepción de Fernando, le retiraran la palabra. Tanto fue así que ninguno de ellos acudió a visitarle al hospital tras ser intervenido por una obstrucción intestinal.

«Ya pasamos página, que es lo importante», cuenta ahora al medio de corazón, lo que confirma las sospechas de quienes ya veían cerca la reconciliación entre los hermanos. La conversación se produjo este mismo domingo y de desarrolló en un tono cordial, lo que facilitó dar el primer paso para superar el bache y hacer resurgir, así, la excelente relación que los Alba mantenían antes de separarse.