En reflexión más que compartida en el imaginario del lector, menos la edad, contaba él que, cuando cumplió 66 años, edad a la que falleció su padre, empezó a sentir cierta inquietud ante un súbito desenlace, influido por el miedo y el parpadeo de lo imprevisto, como si dos gotas de agua, la suyas, fueran iguales y hubieran de fluir de la mano por un mismo caño. Tal vez quiso decir, bajo el influjo de la posible e inesperada opacidad de nuestro horizonte, si bien la cosa espere su tiempo y dicte el momento… A partir de su maridaje con un lápiz, se esforzó en contar historias sobre lo imprevisto, el amor, la familia, la amistad y la fragilidad de la vida. Lo contó en «¿Por qué escribir?». Cuando tenía 8 años le encantaba el beisbol y admiraba a un gran bateador; y un día lo tuvo a mano y no dudó en pedirle un autógrafo.
El lápiz
12/05/24 4:00
También en Opinión
- Detenida madre e hija por agresión y daños a otra mujer en un bar de Ciutadella
- Ciutadella abrirá a las visitas el túnel de la Guerra Civil que conecta la Catedral con la Plaça Nova
- Que vecinos de Punta Prima estén tan sorprendidos porque la única iluminación...
- Joan Pons Torres (PP): «Menorca no se puede parar porque un señor se ha ido a Sri Lanka»
- Paraules menorquines desaparegudes o en risc de desaparèixer