- Jacinto, buenos días por la mañana, primeramente dos precisiones: no me diga presidente aún, que esto da mala sorte y no pierda el tiempo jaculeando.
- A sus órdenes, presidente. No estoy jaculeando en vano, estoy seguro que la virgen nos ayudará con el Abascal. De todas formas, en las generales vamos a arrasar, presidente.
- Bueno, usted y su optimismo. Por eso lo hice jefe de campaña, pero recuerde que no hay que vender la piel del oso antes de cazarlo, o como decimos en Galicia non hai pouco que non chegue nin moito que non se acabe. A ver, ¿qué tenemos para hoy, Jacinto? Agenda, agenda. ¿Por qué flanco atacamos al gobierno? ¿Qué le parece a usted si le damos duro con la política internacional? Ya habrá visto al susodicho en la Cumbre Iberoamericana, que desde que nuestro querido rey mandó callar a Chávez ya no es lo que era.
- Bueno, podríamos hacer unos memes sobre la guayabera de Sánchez y regar con ellos España desde nuestras cuentas falsas.
- ¡La guayabera! Nada de guayabera, eso ya lo sacará mañana Ana Rosa en su programa. Nada, yo me imagino la portada del «Abc» de mañana, quien dice el «Abc», dice «La Razón», dice «El Mundo», dice «OK diario», dice «El Periódico», dice «El País», ya me entiende, Jacinto. El titular será: «Sánchez se reúne con los dictadores iberoamericanos». Y una foto de Sánchez con Maduro, con Lula y con Castro.
- Señor presidente, Maduro se encontraba malito y no ha asistido, además ahora Biden nos dice que no metamos cizaña con Venezuela, que suyo es el petróleo que consumimos, Lula no ha ido por neumonía y Raúl Castro hace años que ya no es presidente. No obstante, he de advertirle que…
- No interrumpa mis elucubraciones, Jacinto. Pues le sacamos con Ortega o con Gustavo Preto y añadimos el concepto «pleitesía»: «Sánchez rinde pleitesía a los dictadores». ¿Qué le parece? Soy máis listo que un allo.
- Nada, presidente. La idea es buena, pero el Danuiel Ortega ha quedado en Nicaragua y el Petro dice que en la próxima cumbre invitarán a la nación saharaui. Pero, además, he de advertirle que…
- Por favor, Jacinto. Déjeme pensar. ¡Ya está! Mientras Sánchez rinde pleitesía a los dictadores nosotros montamos un acto en Madrid con el presidente verdadero de Venezuela, el superdemócrata Juan Guaido.
- Le sugiero no usar la palabra pleitesía que en realidad significa arreglar conflictos, siendo el pleités un mediador, y les aconsejo usar el término autócrata en lugar de dictador. Respecto a Juan Guaido, mejor no lo invitamos, ya que hoy solo lo reconoce Estados Unidos. Pero insisto, querido presidente, yo no sacaría el tema porque…
- Sí, un tema de política internacional cada semana. Hay que demostrar a nuestro electorado que Feijóo es ducho en todas las materias. Así que, ¡adelante Jacinto! ¡Al ataque mis valientes!
A l'endemà…
Ring, ring, ring…
- ¡Jacinto! ¡¡¡Jacinto!!!
- Sí, señor presidente. A sus órdenes.
- ¿Ha visto usted la portada del programa de Ana Rosa? ¿Lo ha visto? Allí estaba Sánchez y su majestad, los dos con su elegante guayabera en Santo Domingo. Y nosotros diciendo que Sánchez, con el Rey al lado, rendía pleitesía a los autócratas. Carallo, Jacinto. ¿Y ahora cómo lo arreglamos? Pobrecito rey, con los malvados autócratas.
- Era lo que yo quería decirle, presidente, que Felipe VI también estaba, mi presidente, pero usted no me dejó. ¿Qué le parece si hoy le damos fuerte con las concesiones a los vascos?
- No, Jacinto, a los vascos ni mentarlos, que me temo que tendremos que pactar con ellos, que polo pan baila el can. Carallo, Jacinto, es que no da ni una. Bueno, nunca choveu que non escampara. Mañana será otro día.