No es muy habitual que a un político cuando se retira se le agradezca su servicio a la cosa pública. No me refiero a que tenga que ser objeto de esa especie de virus que nos invade de organizar cuantos más homenajes mejor. Las medallas repartidas entre «ellos» tienen poco valor. Es más sencillo y natural: le ves por la calle y le estrechas la mano para darle las gracias. Aunque no le hayamos dado el voto. Tampoco hace falta felicitar a todos los políticos que se van a casa, solo a los que nos parezcan honestos y humildes, a los valientes con errores, a los que han sido fieles más a unas ideas o valores que a un partido, a los que cuando hablan te miran y no solo te ven. Especialmente a los que han sabido convivir con el poder sin sucumbir a la tentación de creer que les pertenece, que es «mi tesoro».
Terra de Vent
A los políticos que se jubilan
14/04/19 1:02
También en Opinión
- Fallecen seis personas, entre ellas cuatro menores, en un grave accidente de tráfico en Maó
- Los ocupantes en el asiento de atrás del accidente de Maó no llevaban puesto el cinturón de seguridad
- La UD Mahón suspende sus partidos este domingo tras el trágico accidente
- Maó y Sant Lluís decretan tres días de luto oficial por el accidente que ha costado la vida a seis de sus vecinos
- Ni Maria ni Joan: estos son los 25 nombres más populares de los bebés que nacen en Menorca