La ampliación del parque fotovoltaico de Son Salomó, llamada a convertirse en la actuación más emblemática de la primera fase de la transición energética de Menorca, se sigue demorando. El pasado 6 de octubre ya informamos que no entrará en funcionamiento dentro de los plazos inicialmente previstos. Las obras, que aún no han empezado, tienen un plazo de ejecución de entre los 12 y los 15 meses, por lo que no se podrá poner en marcha hasta 2021.
La intención inicial de los promotores era empezar el 2019 para que en 2020 el ampliado parque ya estuviese operativo, pero los retrasos en la tramitación administrativa y en la resolución de las ayudas de la subasta de renovables específica para Balears han demorado el proyecto. Tras lograr siete millones de euros de esta subasta, los promotores no están dispuestos a seguir esperando a que el Consell cierre un acuerdo con la Societat Martí i Bella, preocupada por el impacto visual de las instalaciones al norte de Ciutadella. ¿Por qué no es posible el acuerdo? ¿Dará Menorca el primer gran salto hacia las renovables con los casi 50 megavatios de potencia del parque de Son Salomó? ¿Retirará la Martí i Bella sus contenciosos?