28/01/20 0:00
La relación entre los dos principales partidos independentistas catalanes, ERC y JxCat, vivió ayer uno de sus momentos de mayor tensión. La decisión de la Mesa del Parlament, con el voto en contra de los posconvergentes, de acatar la resolución de la Junta Electoral -ratificada por el Tribunal Supremo- de retirar el escaño de diputado al president Torra, agrava el conflicto en el seno del soberanismo. Chocan dos líneas muy claras: la de los republicanos, más pragmáticos, y la de Puigdemont y Torra, dispuesto a mantener la desobediencia.