Retos y oportunidades para Menorca dentro de cincuenta años

Pere Pons ya piensa y reflexiona en voz alta cómo será la Menorca del 2066, dentro de cincuenta años. Debe aprovechar las oportunidades de las redes sociales, impulsar el voluntariado y el activismo social, y afrontar sin demora dos cuestiones prioritarias: otra gestión de los recursos hídricos para evitar la disminución y deterioro de los recursos hídricos; y aplicar, como ya ha hecho la isla de El Hierro, en Canarias, las energías limpias. Son actuaciones «urgentes e inaplazables» que dependen exclusivamente de los propios menorquines, como insistió Pere Pons.

El economista que hoy trabaja en Nueva York, conocedor de las tendencias que definirán Menorca cuando hayan transcurrido cincuenta años, nos invita a actuar. ¿Seremos capaces de ponernos de acuerdo en lugar de seguir discutiendo?