Transcurridos cinco años de las manifestaciones y concentraciones masivas en las plazas de las principales ciudades españolas que se engloban como el 15-M, un fenómeno al que también se sumó Balears, ha confirmado que aquella explosión de protesta pacífica respondía a un movimiento muy intenso y profundo de buena parte de la sociedad y no, como determinados sectores del poder político y económico quisieron dar a entender, una simple expresión de inquietud juvenil y pasajera. El 15-M sorprendió a todos los analistas y sociólogos, que en ningún momento intuyeron el poder aglutinador que se estaba gestando entre la ciudadanía tras la durísima crísis -y sus consecuencias- que comenzó en 2008. Un lustro después, nada es ya en España como antes del 15-M.
El 15-M, un movimiento social con consecuencias
16/05/16 0:00
También en Opinión
- El caso de un restaurante de Maó: «No podemos servir cenas porque no hemos encontrado personal»
- El famoso actor que los vecinos de Es Canutells han visto en este velero de lujo
- La frase más repetida esta temporada turística en Menorca: «Más gente, pero menos gasto»
- Cinco heridos leves en un accidente en el polígono de Maó
- La calidad de los hoteles de Menorca se dispara y la oferta de tres estrellas se pierde