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El Ayuntamiento de Sant Lluís se enfrenta a una situación económica muy complicada debido a las indemnizaciones que debe abonar por tres sentencias judiciales relativas a casos urbanísticos: Binifadet, Orfila SL en Son Ganxo y el hotel Xaloc en Punta Prima. En este último caso, el Tribunal Supremo ha desestimado el recurso definitivo y ha confirmado la sentencia, que obliga al Ayuntamiento a demoler 18 apartamentos, indemnizando al promotor que los construyó con licencia.

En los tres casos, los gobiernos municipales de entonces tuvieron la oportunidad de corregir los errores y no lo hicieron. No paralizar las obras de Binifadet o del hotel de Punta Prima en el momento en que se evidenció el problema o no cumplir con el convenio urbanístico de Son Ganxo fueron gestiones deficientes, y ahora se pagan las consecuencias.

El Ayuntamiento de Sant Lluís ha optado por la prudencia y su alcalde mantiene una actitud política discreta ante el problema que tiene sobre la mesa. De todas formas, habrá que afrontar esta situación, con la colaboración del Consell, alguna modificación del PTI, y negociaciones muy complicadas con los propietarios.