El Seprona descubrió el maltrato a los animales, completamente descuidados, en ambas fincas.

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Doce meses de prisión y dos años de inhabilitación para realizar cualquier actividad o profesión relacionada con animales es la condena que ha recaído este mes en un matrimonio de avanzada edad, de Ciutadella, que se encargaba de la explotación de dos fincas situadas al sur del municipio. La sentencia, dictada por conformidad en el Juzgado Penal de Maó, responde al delito de causar lesiones a animales domésticos o amansados, en este caso agravado por el uso de instrumentos que resultan peligrosos para la salud de estos seres vivos causándoles la muerte.

La ejecución del castigo de privación de libertad quedo suspendida en el mismo juicio oral a petición de la abogada defensora salvo que ambos cónyuges vuelvan a delinquir en el plazo de dos años.

En la vista celebrado el pasado día 17 los acusados aceptaron los hechos por los que habían sido imputados el año pasado y la condena que fue conformada por su abogada, la acusación particular que representaba a la propietaria de al menos una de las fincas, y el fiscal.

En octubre de 2023, los guardias civiles del Seprona encontraron en varias inspecciones en ambas explotaciones, 27 vacas muertas sin enterrar, cuatro enterradas y restos óseos de otras esparcidos por las dos propiedades. Habían acudido a realizar esta primera inspección tras recibir la denuncia de un agente de Medio Ambiente.

Además, hallaron en las tres inspecciones que hicieron aquellos días varias ovejas trabadas con cuerdas y cueros, sin esquilmar, y un toro abandonado a su suerte, sin comida ni bebida, que acabó muriendo entre las dos últimas presencias de los guardias. En total observaron 13 ovejas y dos cabras con las patas trabadas siete de ellas con lesiones que precisaban atención veterinaria.

El fiscal concluyó que el matrimonio encargado de las fincas las mantenía en un estado de total abandono, con suciedad, deterioro en las edificaciones y con el ganado ovino y bovino desnutrido y deshidratado hasta causar la muerte de algún ejemplar por inanición. En el escrito de acusación solicitaba la condena de un año de prisión para ambos y tres de inhabilitación para el trabajo con animales, que finalmente, quedó reducido a dos, además del pago de las costas del juicio.