La montaña de la ermita de Son Granot, en Ferreries, pasará a ser de titularidad municipal en su totalidad el próximo año 2025. El Ayuntamiento, que ya había realizado una compra de la parte principal del monte —considerado terreno rústico— con 300.000 euros correspondientes en una de las primeras convocatorias respecto a los fondos del Impuesto de Turismo Sostenible (ITS), completa la operación con un nuevo desembolso de 654.000 euros para hacerse con una parcela de 30.000 metros cuadrados en una franja cercana al Auditori, por «donde discurren los accesos más utilizados para subir hasta la ermita».
El alcalde de Ferreries, Pedro Pons, espera que la adquisición se haga efectiva «durante el primer trimestre» del año. Para ello, el Consistorio necesita confirmar la recepción del certificado de la resolución de la comisión que otorga los fondos del ITS. Aunque ya se conoce que la resolución es favorable, el hecho de no haber recibido aún dicho certificado impide al Ayuntamiento poder incluir la inversión en sus presupuestos. «Imagino que entre enero y febrero ya lo recibiremos, así que entonces ya podremos incorporar esta inversión y ejecutarla», señala el primer edil de Ferreries.
Mejora de los accesos
Al encontrarse este terreno justo en el punto donde los senderistas inician su subida hasta la ermita de Ferreries, uno de los proyectos que baraja el Ayuntamiento es mejorar los caminos que conducen hasta ella, ya que se encuentran algo deteriorados en la actualidad.
«En este caso, a nosotros ya nos interesaba hacer la compra porque como este terreno está catalogado como zona verde urbana en el Plan General, los actuales propietarios no podían hacer nada en él. Al pasar toda la montaña a ser propiedad del Ayuntamiento, podemos empezar a plantear diferentes proyectos para arreglar los caminos. No tenía sentido empezar nada sin asegurarnos que todo el terreno era de titularidad municipal», explica Pedro Pons.
De esta manera, los trabajos se centrarían especialmente en consolidar el firme de los accesos al haber «muchas piedras sueltas» y requerir una intervención para evitar daños. «Hay un trozo del camino que se viene utilizando en los últimos años que está incluso hormigoneado porque hay una gran pendiente, pero claro, esto hoy en día ya está prohibido», indica el alcalde. Para ello, desde el Ayuntamiento de Ferreries ya piensan en contratar a un maestro picapedrero para dejar el camino listo empleando una técnica a base de piedra seca. «Nuestra intención es que sea un camino empedrado, similar a algunos de los tramos que hay en el camino a Santa Águeda», sentencia Pons.
El apunte
Una reconstrucción a causa de un rayo y la voluntad de recuperar el camino antiguo
7 comentarios
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Hay...muchos innocents....
I asfaltar es carrers quan fien fer-ho ,hi ha clots per enterrar una vaca !!
Buen pelotazo ha pegado el titular por tres hectáreas.
... me he quedado sin saber quién es el propietario de esa ermita... si es del obispado, no hace falta arreglarles el camino, que lo haga el propietario si le interesa... si es del municipio, no deberían haber gastado esfuerzos y dineros públicos para arreglar los desperfectos que tiraron abajo la cruz, destrozada por la voluntad de su altísimo que envió un rayo desde las alturas, y si de verdad es municipal, lo mejor es DESAFECTAR el edificio y dedicarlo a algo que ser de verdad útil para la ciudadanía, no esa tontería de ermita que pretende ser lo más alto del municipio, como en tiempos medievales...
Lo recaudado en la ecotasa no era para temas medioambientales
¡Hala!… y ahora a gastar dinero en un “centro de interpretación “.
Para eso era la ecotasa? Para comprar propiedades?