Alaior prevé iniciar las obras de su primera piscina cubierta en un plazo de un año

Así lo afirmó el alcalde José Luis Benejam durante la presentación de los presupuestos de 2025 en el que se reserva una primera partida de 3,8 millones para este centro deportivo. El proyecto integral se ha presupuestado en unos 6 millones de los que el Consell, a través del Plan Insular de Instalaciones Deportivas, asumirá 5 que se sufragarán en dos anualidades. La primera pondrá a disposición del Ayuntamiento 2,9 millones.

La piscina se ubicará al lado del polideportivo, en la zona del campo de fútbol 7. Benejam indica que esta instalación se trasladará a la zona de Los Pinos, aunque no de forma inmediata. De ahí que se estén analizando las necesidades reales de uso de este campo para definir hacia dónde redirigir a los usuarios. «Tiene los usuarios que tiene y no hay ningún problema para que tengan resueltas las necesidades de uso de un espacio de esta naturaleza», señala sin concretar.

La piscina es uno de los proyectos estrella. Pero no el único. El capítulo de inversiones se dispara hasta los 8,4 millones (un 67,6 por ciento más) e incluye más aparcamiento, la compra de Cas Corbo, la climatización de la escoleta y la adecuación del edificio de Santa Rita, entre otros.     

El presupuesto para 2025 alcanza los 23,3 millones, lo que representa un incremento del 24 por ciento. Las cuentas municipales están marcadas por el alza de los costes de los servicios y los gastos corrientes, lo que ha motivado el aumento de la recaudación vía impuestos. Benejam justifica esta actualización tras diez años de congelación. «Ya no se podía retrasar más», asegura. Pese a ello, «la situación del Ayuntamiento es sólida, porque no hay endeudamiento, tenemos un ahorro superior a los 2,4 millones de euros y los saldos bancarios son elevados, pero era incompatible mantener el mismo nivel de ingresos con los incrementos de gasto, personal y servicios», agrega el concejal de Hacienda, Fernando Orfila.

Para Benejam, «Alaior está en plena transformación para hacerlo un municipio más sensible a las necesidades de los ciudadanos; cada euro invertido regresa al pueblo en forma de servicios, infraestructuras y mejoras que impulsan la calidad de vida y el bienestar».