Para acceder a la gaslinera de Es Mercadal también está permitido el giro a la izquierda. | Gemma Andreu

TW
30

El accidente del pasado jueves en la carretera general, localizado en un giro a la izquierda, el del cruce con Rafal Rubí y el Camí Vell de Sant Climent, entre Maó y Alaior, ha venido a recordar que la eterna reforma pendiente en tramos de la vía principal de la Isla aún mantiene al menos dos de estos giros permitidos que suponen un riesgo extremo sin que hayan sido abortados tampoco de forma provisional para salir del paso. Sucede otro tanto con el acceso a la gasolinera situada entre Es Mercadal y Ferreries, a la altura del kilómetro 23, puesto que se trata de otro giro a la izquierda permitido a los vehículos que van en dirección Ciutadella.

La densidad del tráfico en los meses punta del estío eleva aún más el peligro de estas dos maniobras que todavía son posibles en la carretera general. Que en un tramo de un solo carril en cada dirección, un vehículo se detenga para tomar una desviación a la izquierda con la obligatoriedad de esperar a que el carril contrario esté libre para ejecutar el giro, supone incrementar la probabilidad de un accidente por razones obvias, como sucedió esta semana con el camión que golpeó por detrás a los dos vehículos detenidos para la maniobra, además de ralentizar la circulación.

El Consell parcheó otro punto negro de la carretera general, el del cruce a la izquierda para tomar el desvío a Torre-solí, hace dos años. La prohibición del giro, obligando a los vehículos a ir hasta el cruce de la carretera de Es Migjorn para cambiar el sentido, sumado a la reducción de la velocidad y a la línea continúa pintada sobre el asalto han permitido que apenas hayan vuelto a producirse accidentes en un lugar en que los siniestros eran frecuentes y graves en muchas ocasiones.

gg090824001 (4).jpg
El cruce de Rafal Rubí donde ocurrió el accidente. | Gemma Andreu
Noticias relacionadas

Más recientemente el equipo de gobierno de la institución insular ha hecho lo propio en el cruce de Talatí Vell, también de forma provisional, hasta que se ejecute la reforma proyectada el próximo año, con lo que los vehículos han de circular hasta la entrada a la estación de Repsol para poder realizar el giro.

Se trata de dos soluciones transitorias, de una ejecución muy sencilla pero que, al menos, han reducido el riesgo de accidentes. En cambio en Rafal Rubí, con el puente inacabado como testigo para la variante proyectada casi 10 años atrás, y en la gasolinera de Es Mercadal, el conseller de Movilidad, Juan Manuel Delgado, admite que no hay intervenciones previstas por el momento. «En principio no lo hemos tratado pero estamos en ello y dispuestos a hacer un repaso general por si fuera necesario y posible realizar alguna actuación temporal», ha indicado.

Delgado apuesta por «la reforma total, y estamos volcados en ella, pero un tramo tras otro», en referencia a los que están pendientes. Durante el mandato están previstos los comprendidos entre Maó y Alaior, aunque el más inmediato llega hasta poco antes del puente inacabado de Rafal Rubí y a continuación deberá ejecutarse el de Alaior a Ferreries. Delgado señala que el comprendido entre Alaior-Torres-solí y el cruce de Es Migjorn «es posible que lo desglosemos y ejecutarlo antes».

Para el próximo mes está prevista la licitación para renovar toda la señalización horizontal del tramo entre Ferreries y Ciutadella, avanza el conseller.

El apunte

«Que aún tengáis la carretera con este peligro permanente es una vergüenza»

El conductor de uno de los vehículos,modelo Volkswagen Tiguan, que estuvo implicado en el accidente del viernes mostró su incredulidad y enojo por la peligrosidad de la carretera general de Menorca, especialmente en el tramo donde ocurrió el siniestro. Su coche era el que estaba detenido para realizar el giro a la izquierda y tomar el Camí Vell de Sant Climent, cuando recibió el impacto del que aguardada detrás, al que a su vez golpeó un camión que no frenó a tiempo porque no advirtió la maniobra. «Qué aún tengáis la carretera de esta manera con este peligro permanente, y que los políticos lo permitan año tras año es una vergüenza», exclamó en tono elevado el conductor mostrando su tremendo enfado.  El turista, que por sus palabras, frecuenta la Isla en la época estival, recordaba que «el año pasado le sucedió a mi hija otro accidente por lo mismo», en referencia al estado de algunos tramos en la principal vía de la Isla y sus peligrosos giros, «y ahora nos pasa a mi mujer y a mi por esta carretera que es de vergüenza», indicó mientras aguardaba que laGuardaCivil de Tráfico concluyera su tarea para la elaboración del atestado. En el accidente resultó herida leve una ocupante italiana del segundo vehículo.