Imagen que ofrecía este miércoles la playa de Sant Tomàs, en Es Migjorn Gran | Antoni Vallejo Ripoll

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El Ayuntamiento de Es Migjorn anunció el año pasado que este verano las playas del municipio contarían con un innovador sistema de duchas sostenibles, que funcionarían con agua del mar y energía solar, pero a estas alturas de la temporada las antiguas duchas permanecen cerradas como medida para ahorrar agua, y no hay ni rastro del nuevo sistema.

Por ello, desde el Consistorio no dudan en cargar contra el Govern balear, y denuncian que el retraso del proyecto se debe a la lentitud en la tramitación de los permisos necesarios por parte de la Dirección General de Costas y Litoral.

Revisión de los proyectos

Desde el Ayuntamiento aseguran que iniciaron la tramitación del proyecto en abril del 2023, cuando las competencias de Costas todavía no se habían transferido al Govern, y lamentan que este proceso no ha servido para acelerar los trámites.

«Nosotros hemos hecho un esfuerzo con la redacción del proyecto, pero topamos con lentitud de las otras administraciones, especialmente cuando se trata de temas relacionados con el litoral», señala Antoni Borràs, concejal de Hacienda, Turismo y Medio Ambiente.

Esta situación provoca, según Borràs, que a menudo los proyectos se tengan que revisar una vez han obtenido el visto bueno, porque los precios quedan desfasados y es necesario buscar nueva financiación.

Por todo ello, piden al Govern una mayor celeridad en la aprobación de un proyecto que cuenta con financiación del PIC 2023 del Consell, y que podría servir como modelo para otros municipios, aunque ya tienen asumido que será muy difícil ver las duchas sostenibles  en marcha este verano.

El apunte

Será necesario realizar una perforación para captar el agua

Aunque inicialmente estaba previsto que la captación del agua se realizara directamente del mar, desde la Dirección General de Costas y Litoral se ha pedido al Ayuntamiento que modifique el proyecto, y finalmente será necesario realizar una perforación para coger el agua. La idea del Consistorio es que las duchas se sitúen en las pasarelas de acceso a las playas de Sant Tomàs y Sant Adeodat, muy cerca de donde están ahora. En total, se instalarán cinco duchas sostenibles, que funcionarán mediante placas solares, y el coste de ejecución del proyecto ascenderá a 73.000 euros, aunque si se demora mucho seguramente este precio se incrementará.