La escoleta Es Pouet acaba el curso el 31 de julio y en agosto se ofrece el servicio de verano, pero no hay dinero para las nóminas | Katerina Pu

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La situación insostenible de las 19 trabajadoras de la escuela infantil Es Pouet de Alaior les lleva a comunicar públicamente las dificultades que han sufrido todo este curso 2022-2023 para cobrar las nóminas, con parte del sueldo de junio aún pendiente de cobro.

Según las educadoras, limpiadoras y administrativas,  la Unión Temporal de Empresas (UTE) que gestiona el servicio les ha informado que no puede pagar ni julio ni agosto.

Inciden en que a pesar de los retrasos y problemas con los salarios desde febrero, nunca han dejado de asistir a las familias, «ni de poner buena cara», ofreciendo el único servicio público de escoleta infantil de Alaior –con 114 niños y niñas de 0 a 3 años matriculados actualmente–, pero ya no pueden más, hacen pública su situación y plantean paros.

Deudas   

Vanessa Camps, gerente de la UTE gestora de Es Pouet explica que desde que terminó en octubre de 2021 el contrato de cuatro años con el Ayuntamiento de Alaior, han seguido ofreciendo el servicio, sin ánimo de lucro, con un año de prórroga y otro año más excepcional hasta que haya otra empresa, a pesar de no interesarles, por no dejar al municipio sin escoleta infantil.

El déficit económico originado por el importante descenso de matrícula en septiembre de 2020, a causa de la pandemia, ascendió a 17.000 euros, y por ello no querían continuar con la escuela infantil pero desde el Consistorio les pidieron que continuaran ya que no podían preparar los pliegos de una nueva licitación por cambio de concejal de educación y finalización del interventor.

Los problemas se agravaron con el incremento de los costes por la inflación generalizada y el aumento legal de los salarios, que deben asumir, generándose un nuevo déficit en el curso 2021-2022, de 36.000 euros más.

Camps explica que la UTE ha justificado cada euro invertido en la escoleta pero están ofreciendo un servicio por encima de lo que están cobrando del Ayuntamiento, correspondiente al contrato firmado en 2017. Además los 53.000 euros de déficit extra, esperaban cobrarlos del Consistorio entre el pasado mes de junio y julio, ya que el alcalde José Luís Benejam aseguró en una reunión urgente del 23 de mayo, cinco días antes de las elecciones, que así sería, pero siguen esperando y ya no disponen, muy a su pesar, de más crédito bancario para pagar a las trabajadoras.

Orfila, nuevo concejal, confía desenredar la situación este mes

Juan Fernando Orfila Timoner, nuevo concejal de Alaior de Hacienda, Contratación, Educación, Subvenciones, Ayudas de otras administraciones, Atención a la ciudadanía y Transparencia, expresaba este viernes a este diario su sorpresa por la difícil situación económica que vive la UTE de la escuela infantil del municipio, Es Pouet, que le han comunicado directamente.

Desde el nuevo gobierno municipal de José Luís Benejam, que continúa como alcalde, el nuevo concejal de educación responsable del servicio municipal de escoleta infantil que atiende a más de un centenar de alumnos entre 0 y 3 años, valora la «máxima importancia del servicio de escoleta infantil para las familias y para el pueblo».

Orfila explica que el Consistorio por un lado está pagando los recibos mensuales, como el del pasado 13 de julio, y por otro, están trabajando para desenredar el problema de las facturas pendientes de pago derivadas de los sobrecostes. El concejal de Educación espera que la próxima semana se pueda avanzar en el visto bueno de los técnicos del Ayuntamiento.

El apunte

Ninguna empresa se presenta al concurso, desierto por segunda vez

El concurso abierto por el Ayuntamiento de Alaior para adjudicar la escuela infantil Es pouet ha quedado desierto por segunda vez, según informa el concejal    de educación Juan Fernando Orfila. La primera convocatoria se resolvió a principios de primavera, sin ningún interesado presentado, y lo mismo ha sucedido por segunda vez.

La unión temporal de empresas (UTE) que gestiona el servicio es la alianza de las seis cooperativas dedicadas, sin ánimo de lucro, a gestionar escoletes en la Isla. Legalmente no se podría presentar la misma UTE para gestionar el mismo servicio sino que se tendría que formar otra nueva,    pero tampoco ha sido así, y ni estas cooperativas ni otras empresas han mostrado interés.