Los mariscadores y acuicultores se asociaron recientemente para defender sus intereses como colectivo.

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Los trece mariscadores y acuicultores de la Isla han creado la Asociación Balear de Acuicultura y Marisqueo con el objetivo de diferenciar sus demandas de las del sector pesquero. Seguirán integrados en la cofradía de Maó, pero cogerán fuerza como colectivo a la hora de llevar sus demandas ante la administración o pedir ayudas al fondo europeo.

El presidente de la asociación, Paco González, explica que su principal preocupación es que se les incluya en los comités de las administraciones en las que se toman decisiones sobre el medio marino y el sector pesquero para, así, «conseguir más respeto» para su actividad y poder dar su opinión respecto a las nuevas normativas.

Sus reivindicaciones implican discutir que sus buques estén en lista cuarta y propiciar que las concesiones de los espacios de dominio público sean más largas que las actuales. Lo primero supone, dice González, que sea necesario tener más formación y que en algunos casos se tengan que adquirir nuevos buques, con el coste económico que supone. Lo segundo les garantizaría una mayor estabilidad en su negocio, dado que les aseguraría un espacio durante más tiempo para, por ejemplo, los viveros de mejillones en el puerto de Maó. Buscan también subvenciones diferenciadas de las de los pescadores, que les permitan adaptar las instalaciones a las nuevas normativas de pesca y agilizar los métodos de producción.

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