El dique de Ciutadella ya acogió el año pasado el atraque de un crucero turístico. Ahora, el ente público Ports de les Illes Balears quiere que también puedan usar la infraestructura los conocidos como ‘megayates’

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El ente público Ports de les Illes Balears quiere exprimir al máximo las posibilidades que ofrece el nuevo puerto exterior de Ciutadella, y a la vez atraer hasta la ciudad de Poniente un sector turístico de alto poder adquisitivo. Combinando estos dos factores, la Conselleria de Turismo pretende que los llamados 'megayates', embarcaciones privadas de gran eslora, pueden pasar la noche en el dique de Son Blanc.
La idea es que estos yates pudieran recalar en el puerto cuando el último de los barcos de línea que opera regularmente en la instalación hubiera salido del mismo. Ports quiere aprovechar que ninguno de los grandes buques acostumbra a pasar la noche en Ciutadella para que su hueco sea ocupado por uno de estos yates.

El ente portuario recuerda que estas embarcaciones acostumbran a pasar solamente una noche en cada destino. En esta escala, suelen recargar combustible en grandes cantidades y otros productos, con lo cual Ports quiere hacer posible el amarre de estas embarcaciones y que además puedan encontrar todo aquello que necesitan para continuar con su viaje.

El alcalde de Ciutadella, José María de Sintas, ve con muy buenos ojos esta opción. «Son barcos de gran eslora, cuyo pasaje puede recalar en Ciutadella. Evidentemente, nos interesa, y sé que Ports está trabajando intensamente para hacer posible su presencia en nuestro puerto», apunta De Sintas.

Esta iniciativa es una de las que se dieron a conocer en la Feria de cruceros de Miami, a la que asistió el alcalde. Tras este encuentro, De Sintas apunta que «se trata de un trabajo que no da frutos al instante, y en la que nuestro objetivo no es competir con Maó. Cualquier crucero que llegue a la ciudad de levante es una buena noticia para Menorca y, consecuentemente, también para nosotros, y desde Maó se está haciendo un muy buen trabajo en este sentido. No queremos competir, sino sumar», concluye De Sintas.