El modelo mixto de cuidados paliativos que se desarrolla en el Área de Salud de Menorca, bajo la coordinación del doctor Javier Lacueva, puede crear escuela y aplicarse también en Mallorca, con la división por sectores de esa isla, ya que permite al enfermo terminal estar rodeado de los suyos, en familia, con la misma atención profesional que tendría en un hospital. "Nosotros lo hicimos porque creí que aquí se podía dar, por las dimensiones de la Isla y el número de enfermos, pero creo que es un sistema que se va a extender, porque al final de la vida, el paciente lo que quiere es estar en su casa, la muerte hospitalaria siempre es algo más frío", aseguró ayer el coordinador del equipo de Cuidados Paliativos de Menorca, Javier Lacueva, tras la celebración en la Illa del Rei del V Encuentro Balear dedicado a este ámbito sanitario.
En la jornada, que se organiza cada dos años, el tema monográfico fue el trabajo de equipo de las diferentes profesiones que se ven implicadas (médicos, enfermeras, psicólogos, trabajadores sociales, auxiliares, sacerdotes, terapeutas del duelo) en los cuidados paliativos. "En el día a día es lo más difícil", apuntó Lacueva, quien se mostró muy satisfecho del funcionamiento del equipo que tiene a su cargo.
"En Menorca tenemos un equipo experto, muy consolidado, nos podemos dar por satisfechos, suena mal en los tiempos que corren, pero no necesito más personal, somos suficientes en las distintas especialidades y todos tenemos una formación avanzada", aseguró el médico, quien también señaló que "no me consta ningún tipo de recorte" en este apartado de la sanidad. "No se han alterado las plantillas, y los cierres del Hospital General y el Joan March de Mallorca no se han llevado a cabo, en la jornada se ha tranquilizado a sus trabajadores, que habían pasado mucha incertidumbre, no se va a echar a nadie", manifestó el especialista.
Según Lacueva, "basándonos en la esperanza de vida y en la cantidad de enfermedades cancerígenas o de personas mayores con enfermedades crónicas es evidente que si alguna medicina tiene que crecer y no se tiene que recortar para nada, porque nos equivocaríamos gravemente, es la medicina paliativa". En este sentido, añadió que los cinco coordinadores de cuidados paliativos existentes en Balears "nos sentimos tranquilos y apoyados por la Conselleria" ya que se entiende, aseguró, que la paliativa "es la parcela de la medicina de futuro, por las necesidades de la población".
Respeto mutuo
Los profesionales asistentes a la jornada coincidieron en que para mejorar su asistencia se debe dar una serie de condiciones. La estabilidad laboral, para "no tener la cabeza pendiente de si se cuelga el trabajo"; la formación avanzada en la especialiad; la unión del equipo, "algo fundamental"; y el respeto a las decisiones de cada una de las disciplinas, "que no esté siempre la del médico por encima", son los principales factores que influyen en una buena asistencia y que, a modo de conclusión, expuso ayer Lacueva.
"Somos conscientes de que podemos mejorar, es una medicina de muchísimo estrés, trabajas con el sufrimiento, con la muerte próxima, tienes que estar contigo mismo muy bien para dar un servicio adecuado, cada día emociones y final de vida, provoca momentos de bajón en los que te das cuenta de que la situación te está afectando", explica el médico, quien lleva 17 años al frente del equipo de cuidados paliativos menorquín.
Dicho equipo lo forman dos médicos, dos enfermeras, una psicóloga y una trabajadora social del hospital a demanda; dos de los profesionales del grupo son además terapeutas del duelo, lo que permite, según Lacueva, dar una asistencia "muy adecuada". En la actualidad existen 70 pacientes dentro del programa de cuidados paliativos en la Isla y solo tres hospitalizados, por lo que "no tendría sentido crear una unidad específica", señala Lacueva.
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