El equipo de gobierno del Consell no se posiciona ni a favor ni en contra de la implantación de algún tipo de transporte público en playas vírgenes muy saturadas, como Macarella. Es la propuesta que formula el GOB para evitar la masificación de los accesos y restringir el acceso de vehículos privados a las áreas naturales.
El conseller insular de Movilidad, Luis Alejandre, afirma que recibió a los representantes del colectivo ecologista y escuchó su propuesta. No obstante, considera que a día de hoy, en pleno mes de agosto, es imposible tomar medidas ya para esta temporada. El conseller promete estudiar la propuesta de los ecologistas "con calma" porque afirma que la implantación de un sistema de transporte colectivo implica un análisis "con detenimiento" para sopesar si resulta viable. Alejandre señala que hasta que la propuesta no se evalúe a nivel técnico, el Consell no puede mostrarse ni partidario ni detractor de la medida. De hecho, la propuesta del GOB, de la que informó ayer este diario, ha generado numerosos comentarios en nuestra web, con opiniones a favor y en contra y sobre la incidencia del transporte público en la economía de las empresas de rent a car. Otras opiniones son favorables a la propuesta ecologista para preservar las calas vírgenes de la masificación de coches. Una de las sugerencias espontáneas en la web es la de habilitar un aparcamiento en Sant Joan de Missa y realizar el transporte público a las playas a partir de este punto.
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