Los docentes critican el ‘no' al acuerdo político en educación

La federación nacional pide que, a falta de un compromiso de los partidos, las organizaciones del sector alcancen un acuerdo social con el Gobierno

Recepción. Los asistentes al congreso, durante una recepción en el Consell - P. Fedadi

E. GagoMaó10/05/10 0:00

"Decepción y frustración" son los inequívocos términos que ha elegido el XXI Congreso de la Federación de Asociaciones de Directivos de Centros Educativos Públicos (FEDADI) para dar a conocer el estado de ánimo del colectivo ante la ruptura de las negociaciones del Pacto de Estado por la Educación. Los directores de Secundaria que se reunieron en Maó entre el jueves y el sábado, consideran que "una vez más, las fuerzas políticas no han estado a la altura, defraudando las expectativas" que había depositadas en este acuerdo. Afirman que esta ruptura supone que los partidos han hecho primar "sus intereses sobre el bien común".

Prosigue el documento recordando que "nuevamente nos vemos abocados a la inestabilidad legislativa y a la falta de soluciones consensuadas". Para solucionar los problemas que "nos vienen señalando organismos nacionales e internacionales", FEDADI no sólo muestra su "disposición a seguir colaborando con el Ministerio" sino que, como "parte afectada y perjudicada", hace un llamamiento "a los diferentes sectores para que, al menos, sea posible llegar a un acuerdo social", en vista de que el político ha fracasado. Por lo que respecta a las propuestas del congreso, cabe destacar que, en el primer caso, FEDADI reclama que "no se pierda la oportunidad de diseñar adecuadamente" el máster de aprendizaje de profesorado que ha sustituido al "denostado" CAP.

Para ello, proponen que se potencien las prácticas y se uniformice su contenido, por la "disparidad de situaciones en las distintas Comunidades". Asimismo, demandan que la formación de los equipos directivos se regularice y se incluya la formación continua, para equipararla a la de los países europeos. FEDADI enviará estas consideraciones a las consejerías de Educación de las Comunidades, así como al Gobierno central, del que esperan que actúe como un "director de orquesta".