Sin embargo, Damià Borràs, quien hace unos meses había avanzado que las previsiones para el inicio de las obras apuntaban al pasado enero, sostiene que desde el área que dirige se han llevado a cabo las tareas previas para avanzar todo lo posible y ejecutar cuanto antes la que sin duda es la actuación más importante del presente mandato en materia de carreteras. Una vez que se dé luz verde desde el Gobierno central, según explica el conseller, se establecerá el pertinente plazo de dos meses para que las empresas presenten sus ofertas. A partir de ese punto, Borràs reconoce que el ritmo de ejecución del desvío en el municipio de Ferreries dependerá de los plazos de ejecución del proyecto constructivo.
No obstante, el responsable insular de Movilidad mantiene que la variante se ejecutará durante el presente mandato, tal y como se había previsto desde un principio, poniendo así punto y final a un ansiado proyecto que se ha ido demorando durante los últimos años.
En otro orden de asuntos, Borràs informó ayer de que las obras de rehabilitación del tramo de carretera que une Ferreries y Es Migjorn sólo están pendientes de tareas de asfaltado, que se realizarán esta semana si las condiciones meteorológicas lo permiten.
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